El sector minero podría llegar a perder hasta 18.000 puestos de trabajo este año, y la mayor parte de ellos serían subcontratados. Recorte de costos contempla revisión de contratos. En el primer semestre, Codelco ajustó 107 y generó ahorro de US$ 87 millones.
Por Gabriel Alvarez L.
La fuerte caída en el precio del cobre durante el año, cuyo valor promedio ha disminuido 17,3% interanual hasta US$ 2,609 la libra, tiene sometida a gran presión a la industria minera.
Por ello, Codelco y las grandes firmas privadas han endurecido sus políticas de baja de costos, lo que ha implicado la desvinculación de trabajadores.
Según cifras del Consejo Minero, al cierre de 2014 la minería entregaba 242.000 empleos directos (38% propios y 68% contratistas), mientras que a fines del primer semestre ese número llegó a 227.000. Es decir, hubo una pérdida de 15.000 empleos directos.
En este complejo escenario, actores de la industria y representantes de empresas contratistas adelantaron que la dinámica de reducción de costos y eventuales desvinculaciones continuará.
Un alto ejecutivo del sector prevé que este año se podrían perder alrededor de 18.000 empleos, la mayor proporción serían trabajadores contratistas. Esto, debido a que las mineras, al ajustar sus costos, se los traspasan a las contratistas, las cuales también tienen que ajustarse.
Difícil panorama
Joaquín Villarino, presidente ejecutivo del Consejo Minero, dijo que “si se considera que dentro del trabajo directo que entrega la minería, dos tercios está compuesto por contratistas, es lógico que un número importante de las potenciales desvinculaciones sean más de las empresas contratistas que de las mismas compañías”.
Una visión similar tiene Cristián Vizcaya, presidente de Agema, entidad que agrupa a más de 30 empresas contratistas y que emplea a cerca de 10.000 personas. “Nos preocupa la situación, pues nos afectará bastante”, advierte.
Añadió que “nuestras proyecciones para este año apuntaban a que la industria de contratistas crecería 15% este año, en ventas. Ahora creemos que sería un milagro si es que logramos un 10%. Esto, obviamente nos lleva a evaluar posibles desvinculaciones”.
En Aprimin, otro actor relevante entre los contratistas (tiene 101 asociados que dan empleo a unas 130.000 personas, de las cuales un poco más de la mitad trabaja dando servicios al interior de las operaciones mineras), su presidente, Andrés Aguirre, expresó su inquietud por este panorama y sostuvo que “somos los proveedores directos quienes recibimos primero los impactos (…) “si una minera decide parar o reducir producción, obviamente, afecta los contratos, y a las personas que allí trabajan”.
El factor contratos
Vizcaya explicó que la reducción de costos de las empresas, tanto de Codelco como de las grandes privadas, implica la revisión de los contratos que tienen con las empresas contratistas. Esto, a su vez, lleva a estas firmas a tener que desvincular a trabajadores.
Ejemplificó que “si actualmente tengo un contrato con una empresa que requiere de 300 trabajadores, tras ajustarlo ese número podría caer a 200”.
Codelco revisó 107 contratos con empresas contratistas el primer semestre, generando un ahorro de US$ 87 millones. Como la meta es lograr un ahorro de US$ 132 millones en 2015, por este ítem, la compañía seguirá revisando contratos en el segundo semestre.
Si bien esto no ha implicado hasta ahora desvinculaciones, Vizcaya prevé que comenzaría a notarse en lo que resta del año.
Otra compañía que está revisando contratos es Minera El Abra. Luego de que la semana pasada su matriz, la estadounidense Freeport-McMoran, anunciara que reducirá en 50% la explotación de esa mina, este miércoles dijo que desvinculará a 650 trabajadores propios. El próximo paso que debe dar la firma es revisar los contratos que mantiene con sus contratistas, para adecuarlos a la nueva realidad, lo que provocará que estas empresas deban despedir a trabajadores.