En doce meses se generaron 143 mil puestos de trabajo, de los cuáles 64 mil son públicos. Los sectores más dinámicos en creación de empleo fueron Construcción con 35 mil plazas y Transporte y Comunicaciones con 31 mil.

Por Carlos Alonso.

La tasa de desempleo se mantiene resiliente al ciclo de desaceleración que enfrenta la economía. Esa es la primera lectura que surge tras analizar el 6,6% que registró la tasa de desocupación en el trimestre móvil mayo-julio, que significó un incremento de 0,1 punto porcentual (pp.) respecto del trimestre móvil anterior y en doce meses. Sin embargo, algunos indicadores comienzan a mostrar un deterioro del mercado laboral.

De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en doce meses el incremento de la tasa de desocupación fue consecuencia de las variaciones positivas de la fuerza de trabajo (1,9%) y de ocupados (1,8%), junto al aumento de los desocupados (3,5%). Dado el crecimiento de la población en edad de trabajar (1,6%), las tasas de participación y ocupación aumentaron 0,2 pp en igual período.

Asimismo, las principales incidencias en el aumento de los ocupados fue el empleo asalariado (2,4%) y trabajadores por cuenta propia (1,3%). “Estos resultados nos demuestran que al final del día el país está enfrentando bien la situación económica”, indicó la ministra del Trabajo, Ximena Rincón.

Debilidades

Aunque los resultados a primera vista no muestran un deterioro significativo, los economistas comienzan a ver algunas señales de debilidad.

Una de ellas la describe el economista de Bci Estudios, Felipe Ruiz, quien señaló que el registro de desempleo de julio no muestra mayores cambios respecto a lo observado en los últimos meses, “aunque ya se empieza a ver un empeoramiento en los indicadores ligados a actividad y un menor dinamismo en la creación de empleo público”. En este punto, añadió que “consideramos que los registros de desempleo comenzarán a incrementarse ante los potenciales efectos de la Reforma Laboral y los ajustes internos ante el actual ciclo económico, por ello, nuestra visión apunta a niveles de desempleo de 7% en el corto plazo”, sostuvo.

Mientras que Cristóbal Gamboni, de BBVA, acotó que si bien el sector público sigue siendo relevante, la creación de este tipo de empleo ha ido disminuyendo. “En el trimestre terminado en julio el 45% de la creación anual de empleos correspondió directa o indirectamente a este sector, porcentaje que fue 79% en el trimestre anterior y 90% el previo”, comentó. Es más, la generación de plazas laborales en el sector público llegó a su menor nivel desde junio del año pasado cuando se crearon casi 60 mil puestos de trabajo, aporte que subió a partir de ese mes hasta alcanzar un peak de 109 mil en septiembre. Ahora el aporte estatal llegó a 64 mil, y se espera que el próximo año siga bajando.

Según datos de BBVA, en doce meses se crearon 143 mil empleos, pero en el margen se destruyeron más de 9 mil empleos y desde el trimestre móvil terminado en enero, se han destruido 51 mil empleos.

No obstante, en el trimestre mayo-julio la mayor parte de los sectores crearon empleos: construcción (35 mil), transporte y comunicaciones (31 mil), y hoteles y restaurantes (28 mil); mientras que hogares privados, electricidad gas y agua, minería y pesca destruyeron puestos de trabajo. Según BBVA, de los 143 mil empleos creados en 12 meses, 129 mil corresponden a empleo asalariado, con un aumento de 2,4%. “El empleo asalariado continúa como el gran motor con un 2,4% de expansión y 1,7 puntos de incidencia, lo que significa prácticamente la totalidad del nuevo empleo. No obstante debe notarse que un cuarto de lo creado en los últimos 12 meses corresponde a la rama Administración Pública y Defensa”, indicó Francisco Klapp de LyD.

En tanto, Alejandro Fernández de Gemines expresó sus dudas: “los resultados parecen inconsistentes con la evolución de los indicadores de actividad”, indicó.