El secretario general señaló que insistirán en varios puntos con los que no quedaron conformes en su paso por la Cámara.

Por Pierina Bertoni.

El secretario general de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Guillermo Salinas, aseguró que insistirán en el Senado en que se aumente el quórum mínimo de los sindicatos a 75% para negociar pactos de adaptabilidad con el empleador. Ello, ante el traspié que sufrió el artículo transitorio que proponía un quórum mínimo de afiliación sindical para estos pactos de 60% el primer año, el cual iba disminuyendo gradualmente hasta el 30%. Como se rechazó no habrá transición y regirá de inmediato el 30%, sin embargo el Ejecutivo adelantó que repondrá este punto en el siguiente trámite legislativo.

“Uno tiene que recoger y valorar que el Gobierno se comprometa a subir los quórum para que los sindicatos queden más protegidos”, indicó Salinas, recordando que la CUT no está de acuerdo con estos pactos que permiten negociar condiciones especiales de trabajo, jornadas, capacitación, materias distintas a las salariales que se concuerdan en la negociación reglada.

“Este tipo de pactos flexibiliza aún más el mercado laboral y este país ya tiene mucha flexibilidad, tanto en contratos de trabajo o de formas de despidos, ¿para qué más? Este punto no se debiera haber discutido en torno a esta reforma”, sostuvo el dirigente.

Pero ese no es el único punto que preocupa a la CUT en el segundo trámite. De partida, explica el dirigente, defenderán los cambios realizados a la extensión de beneficios de la negociación colectiva a los trabajadores no sindicalizados.

La reforma laboral planteaba que la extensión surgiera de un acuerdo entre el empleador y el sindicato, y a través de una indicación se agregó que la no extensión debe responder a criterios objetivos con el fin de que no se produzcan discriminaciones.

Respecto a este punto, se debatió que el sindicato perdía poder, pero Salinas señaló que “hoy día la posibilidad de que se extiendan los beneficios depende de la voluntad del sindicatos y si el sindicato no quiere extenderlos, no se extienden, así de simple”.

Federaciones y piso mínimo

Otro punto de inquietud es que en el proyecto la posibilidad de que negocien las federaciones y confederaciones de manera colectiva será voluntaria y necesita la aprobación de los empleadores. La CUT espera más: “Queremos que puedan negociar de manera vinculante y obligatoria”, para que así no sea necesario que el empleador decida esto.

Y otro tema de insistencia será el piso mínimo indexado, pese a la negativa que han recibido del Gobierno porque considera que el costo sería muy alto para los empleadores.

En servicios mínimos solicitarán aclaraciones luego del cambio a una definición elaborada por la OIT ( Organización Internacional del Trabajo). “Creo que hay una buena redacción, pero en el caso de servicios mínimos veremos que no exista ningún subterfugio que permita a los empleadores reemplazar igual. Ahora, con la redacción actual eso está salvaguardado, pero hay que avanzar más todavía”.