Ayer, la Comisión de Trabajo de la Cámara despachaba el proyecto que estuvo 5 meses en discusión en los cuales se escuchó a más de 130 invitados. En lo medular se mantuvo el proyecto original que envió el Ejecutivo en las materias prioritarias.

Por Pierina Bertoni.

Sin cambios sustanciales respecto del original, la reforma laboral dio ayer un paso significativo en su tramitación. Después de cinco meses, la comisión de Trabajo despachaba la iniciativa -se votaba hasta el cierre de nuestra edición- para su posterior ratificación en la Cámara de Diputados.

En esta instancia hubo una amplia discusión donde los parlamentarios de la Nueva Mayoría hicieron suyas muchas de las peticiones de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) sin lograr “mover” mucho al Ejecutivo de su propuesta.

No obstante salir con las prioridades casi intactas -incluso más flexibles en el caso de los servicios mínimos con reemplazo en huelga- , la ministra del Trabajo, Ximena Rincón, anunció que en el Senado presentaran nuevas indicaciones. “Vamos a reponer algunas cosas que no logramos instalar en la Cámara de Diputados pero creo que vamos a ser capaces de despachar en la Cámara prácticamente la totalidad la reforma”, indicó sin dar más detalles respecto de lo que pretende incorporar en el segundo paso.

Largo trámite

Fueron 5 meses desde que el proyecto entró a la comisión de Trabajo de la Cámara, donde llegaron 132 invitados para entregar su punto de vista, entre los que se encuentran líderes empresariales, como Hermann Von Mühlenbrock, presidente de Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa); y dirigentes sindicales como la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa y distintos sindicatos de empresas. También fueron expertos laborales como Andrea Repetto (cuya exposición fue una de las más citadas en las discusiones posteriores), o la encargada de relaciones laborales y normas internacionales de la OIT, Kristen-Maria Schapira-Feldertroff.

Desde sus inicios, el proyecto generó discrepancias, principalmente por los puntos más polémicos de la reforma en los que se observaba una una gran influencia de la CUT, que se reunían periódicamente con el Gobierno por este tema. Las materias de mayor debate fueron titularidad sindical; implementación de servicios mínimos; extensión de beneficios a los trabajadores no sindicalizados; fin al reemplazo en huelga; existencia de grupos negociadores; piso mínimo de negociación: y la negociación interempresa y por rama.

Estos últimos puntos formaron la bandera de lucha de la CUT y acogidos parlamentarios como el PS, Osvaldo Andrade. Se buscaba que el piso mínimo incluyera el IPC y que todos los trabajadores de una misma rama económica, como por ejemplo empleados de retail, pudieran negociar en conjunto para lograr condiciones laborales comunes.

Sin embargo y a pesar de muchas conversaciones y meses de trabajo, ninguno de estos temas fueron contemplados en las indicaciones del Ejecutivo señalando que podría perjudicar a empresas de menor tamaño y se indexaban los contratos.

Donde sí cedió el Ejecutivo fue en quitarle el carácter de pacifico a la huelga o el concepto de daño moral como una práctica antisindical por parte de los trabajadores a los empleadores. Ello le atrajo críticas del empresariado, porque consideran que estaban a favor de los grupos sindicales.

Por otro lado, los sindicalistas cuestionan la mantención de los pactos de adaptabilidad que permite abrir el abanico de materias a pactar como turnos y jornadas laborales, manifestando que es una medida pro empresarial.

Desde el 15 de abril que la comisión discute en en particular el proyecto que recibió más de 800 indicaciones, de las cuales una gran parte presentadas por los parlamentarios al libro IV, que tiene relación con la negociación colectiva, fueron declaradas automáticamente inadmisibles, porque por Ley, solo puede legislar sobre el tema el Ejecutivo.

Entre medio de este proceso fue el cambio de gabinete, y la comisión otorgó una semana a los nuevos ministros de Hacienda y Trabajo, Rodrigo Valdés y Ximena Rincón, respectivamente, para “poder acomodarse” con los temas y seguir con la votación.