El Dr. Daniel Roizblatt, cirujano de trauma del HT, entrega su mirada de las mejores prácticas que llevan adelante países desarrollados como Canadá. El especialista estuvo un año formándose en Montreal.
Luego de permanecer un año especializándose en el Montreal General Hospital, de la Universidad McGill, el cirujano de trauma del HT, Daniel Roizblatt, comenta prácticas que han permitido bajar la mortalidad de pacientes accidentados en países desarrollados. Entre éstas, destaca la conformación de una red de trauma, junto a un fuerte enfoque preventivo de accidentes hacia la comunidad.

El Dr. Roizblatt explica la importancia de contar con un sistema de trauma, que va más allá de la atención de urgencia que brinda el hospital. Sostiene que países desarrollados como Canadá, han implementado una red de trauma, consistente en una estructura capaz de coordinar de manera eficiente la atención y derivación de pacientes accidentados, abarcando desde la fase prehospitalaria hasta el posterior seguimiento.

En concreto, se trata de manejar al accidentado considerando aspectos como la atención de urgencia dada en las primeras horas en el hospital, su adecuada derivación si corresponde, lugar y forma de traslado (ambulancia, helicóptero), entre otros.

“Hay estudios internacionales que indican que la mortalidad y morbilidad de los pacientes puede mejorar con programas adecuados a nivel intrahospitalario y hospitalario. En Quebec, se implementó un sistema de trauma en 1993. Se hizo un estudio 10 años después y se vio que solo con un buen sistema de trauma la mortalidad bajaba de 50% a 5%. El impacto es muy grande, son los mismos doctores y hospitales, pero organizados de mejor manera”, detalla el especialista.

Asimismo, la realización de un programa preventivo hacia la comunidad, es otro aspecto relevante que puede tener un alto impacto en mejorar los indicadores de salud. En ese sentido, educar en prevención de accidentes en ámbitos como el hogar y colegios también es una tarea a abordar por los especialistas.

El doctor Roizblatt comenta que concluida su especialización cobra aún más valor “el darse cuenta que se pueden hacer muchas cosas no necesariamente con más recursos, sino organizándolos de manera distinta. Se puede mejorar la prevención, el sistema prehospitalario, el funcionamiento de urgencia, para que los procesos sean óptimos y los resultados mejores para nuestros pacientes”.