Las ideas fueron expuestas en la comisión asesora presidencial que propondrá cambios al sistema privado:

Presidente del gremio, Hernán Doren, dice que si los cambios legales que se van a proponer toman mucho tiempo, «es justo para las personas que, habiendo una buena solución, no perfecta, se pueda implementar».

Por René Olivares y Nadia Cabello.

En mayo, la Asociación de Isapres dio a conocer su propuesta para terminar con los cotizantes cautivos, aquellos que por tener una enfermedad preexistente no pueden cambiarse de aseguradora sin perder su cobertura.

Pero ese anuncio, que implica la creación de un fondo común interisapres para compensar el riesgo de la cartera de afiliados, era solo uno de los cambios que plantean. El 19 de junio expusieron ante la comisión asesora de reforma al sistema de salud privado sus ideas en forma íntegra.

La propuesta se basa en tres objetivos: dotar al sistema de mayor eficiencia, equidad y contención de gastos. Así, plantean la creación de un plan básico para todos los usuarios, quienes se incorporarían a él gradualmente, en la medida que entren al sistema o cambien de aseguradora, y con la posibilidad de contratar un seguro complementario.

Haciéndose cargo de una de las grandes críticas que se le hacen al sistema -la falta de transparencia-, proponen homologar los planes haciéndolos comparables entre sí. Y si las personas generan excedentes de cotización, se abren a la opción de que esos recursos sirvan para comprar mejores coberturas o crear «cuentas de ahorro para salud».

Para contener costos, pretenden estimular el uso del AUGE y de las redes de atención, disminuyendo así la libre elección.

«Considerando que la reforma anterior demoró como cinco años en tramitarse, y pensando en que el trabajo de esta comisión llegue a transformarse en un proyecto de ley que demore mucho tiempo, es justo para las personas que, habiendo una buena solución, no perfecta, se pueda implementar», dice el presidente de la Asociación de Isapres, Hernán Doren.

Si bien la agrupación no representa a todas las aseguradoras (están allí Banmédica, Consalud, Vida Tres y Cruz Blanca, entre otras), las que no están en el gremio ven con buenos ojos la idea. El presidente ejecutivo de Colmena, Gonzalo de la Carrera, considera que es un plan sólido y «estamos dispuestos a sumarnos y trabajar juntos por impulsar un sistema de salud privado más inclusivo, justo y transparente».

Eso sí, el secretario ejecutivo de la comisión asesora para la reforma, Camilo Cid, aclara que la de las isapres es una propuesta más, como han presentado otros en la comisión. «Tenemos nuestro propio esquema de discusión. Esta es su solución, no la nuestra», dijo.

Para el director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello, Héctor Sánchez, la propuesta «es un paso importante, pero puede ser que no calce con los tiempos políticos», ya que a su juicio hoy el debate se centra en la pertinencia de crear un fondo único entre isapres y Fonasa, y no solo uno interisapres.

Los cambios en el sistema que proponen las aseguradoras
1 Creación de un Plan Básico de Salud

La propuesta tiene como base la creación de un plan de beneficios común para todos los beneficiarios del sistema privado, «cuyo precio de comercialización no se diferencia por sexo ni estado de salud».

Hoy, estas dos variables están presentes en los planes vigentes y son parte de la controversia jurídica que envuelve al sistema de isapres. Sin embargo, los programas que se ofrecen tienen como patrones comunes al AUGE, la cobertura de enfermedades catastróficas (CAEC) y las licencias médicas, todos elementos que estarían incorporados al nuevo plan.

En la fallida reforma a las isapres del gobierno anterior se intentó introducir un elemento similar, que se llamó Plan Garantizado de Salud (PGS), pero que no fue viable en su minuto debido a que las isapres no estaban de acuerdo con que se aplicara una tarifa única para todos los usuarios. En la propuesta, esta considera tres tramos de edad, distinta de los hasta once que poseen las isapres hasta ahora. Por sobre el plan básico, las personas podrán comprar mejoras de cobertura o de redes de prestadores.

2 Reajustes validados por un tercero

Uno de los elementos que más judicialización han provocado en los últimos años son las alzas del precio base de los planes, que la justicia no ha considerado justificadas en más del 90% de los casos. Ante esto, las aseguradoras proponen la creación de un ente regulador independiente ante el cual las isapres justifiquen sus alzas, tal como hoy ocurre en otros sectores, como el eléctrico y el sanitario, de manera de «tener certeza jurídica en la aplicación de criterios y escrutinio de alzas en tribunales de justicia» .

3 Facilitar la comparación de planes

Cuando una persona compra un plan de isapre, el vendedor habitualmente le muestra una cartilla con las principales coberturas que se le ofrecen. El documento muchas veces resulta difícil de entender, porque las coberturas, generalmente, vienen expresadas en aranceles aplicados solo por ciertas isapres, dificultando su comprensión y comparación. Asumiendo esto, las isapres presentaron una propuesta que simplifica la lectura de esta cartilla a solo cinco elementos, que todas las isapres deben expresar del mismo modo (ver infografía), para que las personas puedan entender cuánto les cubrirán sus planes.

4 Permitir cambios de isapre a todos

El centro de la propuesta, adelantada en mayo por las propias isapres, apunta a que las personas que se ven «cautivas» de sus seguros -ya que ninguna otra isapre las recibiría si intentaran cambiarse por sus enfermedades preexistentes- pedan tener movilidad. Sobre todo, considerando que hoy la única opción real de estos usuarios es irse a Fonasa.

Por ello, las isapres plantearon ante la comisión que pretenden que «beneficiarios de cualquier sexo y edad y con enfermedades pueden cambiarse de isapre una vez al año, cuando el contrato cumpla su anualidad».

Hoy los usuarios sin preexistencias pueden buscar un nuevo seguro durante los tres meses previos al cumplimiento de la anualidad de sus contratos o cuando se realizan reajustes de precio AUGE, cada tres años.

5 Que empleadores cofinancien las licencias

De los siete puntos obligatorios de cotización de salud de un trabajador, las isapres explican que 1,5 se van directamente a cubrir los gastos en los Subsidios de Incapacidad Laboral (SIL), o licencias médicas.

Por eso, y ante lo que consideran un «elevado crecimiento del gasto» en la materia, proponen compartir el financiamiento de estas entre empleadores y trabajadores. El objetivo de esto, afirman, sería buscar una mayor eficiencia (porque se reduciría el gasto indebido) y más equidad (porque se reduciría el fraude).

Además, las isapres proponen que un ente distinto de ellas (y de las compines, en el caso del sector público) para la administración de las licencias médicas.

6 Promover las atenciones preventivas

Aunque el plan AUGE incorporó un Examen de Medicina Preventiva, este no cuenta con los niveles de cobertura que en algún momento se proyectaron. Si las enfermedades se detectan de forma precoz, tienen mejor pronóstico y son más baratas de tratar. Por ello, las isapres proponen fomentarlas.

7 Evaluación de tecnologías sanitarias

Cuándo vale la pena cubrir un medicamento o cierta cirugía, es algo que hoy se resuelve principalmente en los tribunales de justicia. Las isapres proponen la creación de una comisión independiente que defina en base a dos criterios: que sean costoefectivas y seguras para los pacientes.