Según un informe realizado por Hermann Consultores, de pasar de renta distribuida al nuevo sistema propuesto, nuestro país tendría un esquema impositivo inédito para este bloque. La gran mayoría posee un sistema de renta distribuida. Se señala que dicho concepto de base atribuida «carece de certeza jurídica».

Por C. Torres y M. Leiva.

De aprobarse el proyecto de reforma tributaria que se comienza a discutir hoy en la comisión de Hacienda del Senado, tal como está, nuestro país se convertiría en el único de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) donde los contribuyentes deberán pagar por rentas atribuidas. Así lo señala un informe realizado por Hermann Consultores.

Es que el proyecto sustituye completamente el artículo 14 de la Ley sobre Impuesto a la Renta, eliminando el registro de Fondo de Utilidades Tributables (FUT) y dando paso al denominado registro de utilidades atribuibles (RUA). En este nuevo registro se incorpora el concepto de “renta atribuida”, para que los contribuyentes tributen sobre base de renta devengada. El Servicio de Impuestos Internos estimaría una ganancia a imputar a los accionistas de las sociedades, las que a su vez deberán enterar un PPM (Pago Provisional Mensual) de 35% -10% más que el impuesto corporativo-. La autoridad explica que esta retención será un crédito sobre el impuesto que deben pagar las personas, en el sistema integrado chileno.

“En la actualidad no existe evidencia en los países OCDE de un sistema impositivo de este tipo. El concepto de base atribuida carece de certeza jurídica. Lo que comúnmente se utiliza a nivel de países OCDE es renta percibida o distribuida” señala el informe de Hermann Consultores.

Además recalca que como Chile tiene un sistema integrado -donde al final pagan las personas-, la tasa marginal promedio nunca llegaría al techo de 35% (contemplado en la reforma).”Se va a dar la situación extraña que hasta la persona más rica del país va a tener devolución de impuestos”, asegura el director de la consultora, Jorge Hermann.

Sostiene que el gobierno pretende adoptar modelos de sistemas tributarios distintos: “no hay ningún país OCDE que tenga un sistema como éste: con el concepto de renta atribuida y con retención del 10% por parte de accionistas”.

Por esto mismo, expresa su extrañeza de que Chile como asociado de la OCDE no actúe siguiendo sus estándares en el tema impositivo. “Chile entró a la OCDE porque es una organización que busca el desarrollo económico y donde los países miembros intercambian buenas practicas en distintos ámbitos. Pese a ello, estamos viendo que no se están tomando en cuenta las recomendaciones de la entidad”.

FORMULAS UTILIZADAS
Los países de la OCDE utilizan una variedad de enfoques para integrar el impuesto a dividendos, explica Hermann, pero siempre sobre dividendos efectivos.

En el sistema clásico que utilizan desde Islandia hasta Estados Unidos, se consideran todos los ingresos efectivos por dividendos , y el impuesto lo pagan las personas según su tramo. A su vez, existe una desintegración entre el impuesto pagado por la empresa y las personas.

Otro sistema es el de retención de impuestos finales, donde las empresas retienen el impuesto por dividendos y el accionista no paga individualmente.

Un tercer enfoque es el de imputación, donde los impuestos a nivel de empresa y personas están integrados, como en Chile, y donde el impuesto a pagar por dividendos distribuidos se descuenta del crédito fiscal enterado por la empresas.