Dos de las tres grandes gremiales sindicales del país lamentaron que los ministros los hayan «vetado» de la discusión de propuestas como el salario mínimo y los cambios al sistema previsional.
administración de la Presidenta Michelle Bachelet han iniciados diversos debates que involucran al mundo laboral.
El proyecto de Multirut, la discusión que comienza sobre el salario mínimo y los cambios al sistema previsional son algunos de los temas que han marcado la agenda durante las últimas semanas.
Sin embargo, dos de las tres más grandes gremiales sindicales del país expresan sentirse «traicionados» por la Nueva Mayoría, porque no han tenido la posibilidad de participar en las diversas discusiones que inició el Ejecutivo y plantear sus posiciones sobre estos temas.
El presidente de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), Oscar Olivos, critica al Gobierno por la poca capacidad de diálogo que han mantenido con la multigremial.
«Nosotros esperamos ser parte de la discusión cuando esté el salario mínimo. Lamentablemente, y en esto hay que ser absolutamente claros, el Gobierno no tiene la capacidad de diálogo como ha dicho la Presidenta. A los trabajadores no se les invita, cuando se trabaja en un tema especial no se les invita a las comisiones. O sea, a las Central Autónoma de Trabajadores no se les invita. Entonces tenemos una exclusión», dijo.
El dirigente asegura que a la Presidenta Michelle Bachelet y los ministro en general le han pedido audiencias, pero que ninguno siquiera se dio el tiempo en responder.»Cuando la Presidenta habla de un país inclusivo o está mintiendo o la gente que la rodea no está permitiendo que este país sea inclusivo, ya que del punto de vista de los ministerios estamos vedados», expuso.
En cuanto a la posibilidad que ha tenido la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para exponer sus ideas en el debate laboral de salario mínimo y los cambios en el sistema previsional, indica que «el Gobierno la privilegia porque ahí hay una estructura política y nosotros somos una estructura sindical».
Una opinión más crítica contra el Ejecutivo es la que mantiene el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), Segundo Steilen, quien no comparte la relación cercana que tiene la CUT con el Ejecutivo.
«Es peligrosa, hasta mafiosa. Peligrosa porque está poniendo en riesgo la autonomía y el pluralismo sindical. La compañera (presidenta de la CUT Bárbara Figueroa) es una vocera más del Gobierno y los trabajadores cuando se organizan por el país, usted no le anda preguntando por el partido político primero, o a quien apoyan o no apoyan», acusó.
«Un Gobierno que en lo público dice que va a respetar el pluralismo. No hemos sido invitados a La Moneda cuando fue lanzado el multirut y una serie de cosas que se han hecho. Agarraron la vocería de un lado y no están teniendo respeto por nadie. Están tratando de pasar la aplanadora igual», insistió Steilen.
Salario mínimo y cambios al sistema previsional
Pese a sentirse «alejados» de las discuiones en sobre el salario mínimo, ambos dirigentes coincidieron en que este en ningún caso debe ser menor a $250.000. «Creemos que están las condiciones dadas en el país para llegar a esa cifra como mínimo. Además hay varios diputados y senadores durante el Gobierno de (Sebastián) Piñera que pelearon por eso y espermos que ahora cumplan», indicó el líder de la CAT.
Mientras que en el caso del sistema previsional también ambos plantean que haya un sistema mixto de cotización, con aportes de los trabajadores, los empleadores y el Estado.
«Queremos un sistema previsional acorde para lo que fue creado, que es dar una pensión digna para nuestros asociados y a la gente y a los trabajadores del país. Y para lograrlo efectivamente, en este país le toca poner más recursos al Estado y al mundo empresarial», dijo el titular de la UNT.