Académico explica en detalle qué pasará. Al tema también se refirió un ex ministro de Ricardo Lagos.

En un desayuno organizado por la cadena de ferreterías Chilemat, el ex presidente del Banco Central, José de Gregorio, afirmó que la reforma tributaria no afectará a las pymes con utilidades bajo el tramo del 20% y que sólo serán las personas de mayores ingresos las que pagarán más.

En la cita, el ex ministro además manifestó su preocupación por la eliminación del Fondo de Utilidades Tributarias (FUT).

«La incertidumbre y la eliminación futura de un sistema que favorece el ahorro de la empresa nos puede llevar a que en la transición haya un aumento del ahorro. Y hay que tener cuidado, pues en una etapa de desaceleración económica aumentar el ahorro, es decir, reducir el gasto, le agrega más contracción a la desaceleración».

Hernán Villanueva, académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián, explicó a Publimetro con detalle en qué se traducirá la eliminación del FUT.

Para comenzar, el académico indica que esta eliminación consiste en que «las empresas al momento de determinar las utilidades, éstas se entenderán retiradas por sus dueños, tributando en el Global Complementario, según tramo que corresponda a dichas utilidades y que, a diferencia del actual sistema, en el que las utilidades se acumulan en la empresa y al momento de ser retiradas, quedan gravadas con este impuesto final denominado Global Complementario».

De forma más gráfica, «suponiendo que una empresa determina utilidades por 100 millones y el socio propietario de la misma retira el 40% de las utilidades después de impuesto, quedando gravado con un impuesto de 6,687 millones más los 12 millones que pagó como primera categoría, la actual recaudación fiscal sería de 18,687 millones, de acuerdo a lo que plantea la reforma, hoy se entenderán como parte del Global Complementario el total de las utilidades, es decir, como si el dueño las retirara en su integridad o, más bien dicho, el socio tributará por el 100% de éstas, no existiendo utilidades pendientes de tributación como es el actual sistema, por lo que la recaudación fiscal subirá a 26,261 millones. Lo que evidentemente cumpliría con el objetivo de una mayor recaudación fiscal», ejemplifica Villanueva.

Explicado lo anterior, Villanueva cuestiona qué pasará con las pymes que dependen de sus utilidades para financiar su crecimiento, porque con la reforma deberán destinar parte de esos recursos a pagar impuestos.

Frente a ello, el académico concluye que éstas serán las más afectadas «debido a que son ellas las que tienen el mayor impacto impositivo, ya que las grandes empresas no financian sus proyectos con FUT, sino más bien con emisión de deuda o patrimonio, como también financiamiento de la banca, ya que las utilidades son repartidas a sus accionistas».