Investigación británica señala que ingerir este número de vegetales rebaja en un 42% el riesgo de muerte por enfermedad.
Por EFE y A.T.D.
Durante mucho tiempo la recomendación de los especialistas ha sido consumir un total de cinco frutas y verduras al día para estar más saludables. Sin embargo, un estudio realizado por investigadores del University College of London (UCL) señala que aumentar esta cifra a siete o más puede traer más beneficios a la salud.
La investigación, realizada a 65.226 hombres y mujeres entre 2001 y 2013, señala que el consumo de siete frutas y verduras al día rebaja en un 42% el riesgo de muerte por enfermedad, mientras que las «cinco al día» sólo disminuyen el riesgo en un 29%, y si se consumen de una a tres, el beneficio llega al 14%.
Los especialistas británicos utilizaron la llamada «Encuesta Nacional de Salud» que recoge anualmente datos sobre los estilos de vida y dietas de los británicos a través de sus visitas al doctor y de cuestionarios.
La investigación concluyó que cuando se aumenta el consumo de frutas y verduras se disminuye el riesgo de muerte por enfermedades, y resaltó las cualidades protectoras de las verduras frescas, ensaladas y la fruta por su alto contenido en antioxidantes encargados de reparar las células del cuerpo.
Además, subrayó que las frutas enlatadas parecían incrementar las probabilidades de muerte por enfermedad, debido al sirope o almíbar de azúcar que contienen.
«Todos sabemos que el consumo de frutas y verduras es saludable, pero el efecto de la cantidad es asombroso», señala Oyinlola Oyebode, del Departamento de Epidemiología y Salud Pública y autor principal del estudio de la UCL.
Y agrega: «El mensaje claro es que cuanto más frutas y verduras se consumen, hay menos probabilidades de morir a cualquier edad. Además, los vegetales tienen un efecto mayor que la fruta, pero la fruta sigue haciendo una diferencia rea».
Otros países como Australia aconsejan ya el aumento del consumo diario a «dos más cinco» al día -dos frutas y cinco verduras-, mientras que en la mayoría de países se sigue recomendando los «cinco al día», como en Chile.