Índice de Percepción de la Economía (Ipec), de Adimark GfK, se situó en 50,4 puntos en agosto pasado:

En tanto, la mirada de las personas respecto de la nación y sus familias en un año o más mejoró en relación con julio. Esto evitó que el indicador general entrara en terreno negativo o por debajo de los 50 puntos.

Por Silvana Celedón Porzio
Por cuarto mes consecutivo la confianza de los consumidores chilenos experimentó un retroceso. En esta oportunidad influyó la visión que tienen las personas de su propia situación actual y del país.

El Índice de Percepción de la Economía (Ipec) -que elabora mensualmente Adimark GfK- se situó en agosto pasado en 50,4 puntos, de un máximo de 100 y donde las 50 unidades es el límite que marca el equilibrio entre las visiones optimistas y pesimistas.

La cifra representa una disminución de 0,3 puntos respecto de la medición de julio y una caída de 8,8 puntos en relación con el récord de 59,2 puntos alcanzados en febrero de este año.

En la caída influyó principalmente el retroceso experimentado por todos los subindicadores de corto plazo.

De hecho, la percepción personal actual pasó de los 46,7 puntos anotados en el mes de julio, a 42,9 en agosto, mientras que la visión actual del país bajó de 54,4 a 52,2 puntos.

Por su parte, la mirada respecto de la situación económica actual de las empresas también disminuyó de 71,5 a 70,7 puntos.

Otro de los factores que afectaron la percepción de la realidad presente fue el incremento de expectativas que apuntan a una mayor inflación.

La percepción de alzas de precios alcanzó el 56% en agosto, subiendo siete puntos respecto del mes anterior. Así, se ubicó en el nivel más alto de los últimos once meses.

En tanto, el retroceso del Ipec habría sido mayor si las mediciones sobre aspectos de mediano y largo plazo hubiesen seguido esta tendencia.

De hecho, la percepción futura del país a 12 meses y a cinco años exhibió alzas de 0,9 y 3,1 puntos respectivamente, frente a los niveles de julio.

En el sentido positivo, Adimark GfK también destacó el aumento del índice de expectativas de la situación de empleo para los próximos doce meses, ya que luego de bajar durante cinco meses consecutivos, el indicador se recuperó durante el mes pasado, y subió 4,6 puntos, llegando a los 49,7 puntos.

Desacople

Roberto Méndez, presidente de Adimark GfK, señaló que hay dos elementos que están influyendo en el hecho de que la confianza de los consumidores a futuro sea mayor en comparación con la situación actual.

«Probablemente la mayor inflación y un mercado laboral algo más apretado están afectando las percepciones del presente», afirmó.

El futuro se ve más positivo por un mejor entorno internacional, principalmente en Estados Unidos y Europa, agregó Méndez.

«Los riesgos de una crisis son cada vez menores», indicó.

A esto sumó un discurso político más moderado en materias económicas por parte de los distintos candidatos presidenciales. «El lenguaje se ha ido moderando y eso lo sienten las personas», afirmó el presidente de Adimark GfK.En opinión de Méndez, los riesgos que podrían afectar la evolución del Ipec radican en aumentos significativos en los precios de productos «sensibles» para las personas y un cambio en la tendencia del empleo (ver recuadro).

BAJAS CONSECUTIVAS
Considerando agosto, el Ipec muestra su peor racha desde inicios de 2011, con una caída por cuarto mes consecutivo. Ajuste de salarios anticipa desaceleración del consumo
La Cámara de Comercio de Santiago (CCS) publicó ayer un informe donde advierte que los salarios reales en el país ya comenzaron a dar «claros signos» de normalización en los últimos meses.

El estudio señala que en los últimos trimestres, las remuneraciones escalaron rápidamente, desde crecimientos anuales del 3,6% en el tercer trimestre de 2012, a 4,8% en el segundo trimestre de este año. Específicamente en el bimestre mayo-junio de 2013, el crecimiento se empinó por sobre un 5% real, alejándose sustancialmente de las referencias históricas y del aumento en la productividad laboral.

Entre 2006 y 2013, las expansiones salariales han promediado aproximadamente 2,6%.

De acuerdo con la CCS, los antecedentes disponibles de los meses de junio y julio de 2013 sugieren que esta fase expansiva estaría terminando, lo que permitiría una mayor convergencia entre la evolución de los salarios y de la productividad.

De hecho, el crecimiento salarial real en junio fue de 3,8%, en comparación con el 5,1% de mayo. En el último registro de julio, la variación de las remuneraciones se ubicó en 2,9%. Según la CCS, la tendencia iniciada debería extenderse hacia el resto del año.

2,9%
Esa fue la variación del Índice Real de Remuneraciones en doce meses registrado en julio de este año, de acuerdo con el INE.