Recursos de protección contra alzas de planes ascenderían a 160.000 este año, el triple que en 2012.

Por Costanza Cristino

Tras la última alza en los planes de salud de las Isapres, como consecuencia del aumento de las enfermedades AUGE (GES), se interpusieron más de 60 mil recursos de protección de parte de los afiliados con el objetivo de que no se concretara el ajuste. La cifra superó a todos los recursos interpuestos en 2012 por alza de planes, que bordearon los 45.500. Este incremento, en conjunto con otros factores, están complicando a las Isapres, especialmente a las dirigidas a segmentos populares.

Y es que, según datos de la Asociación de Isapres, entidad gremial que agrupa a seis de las siete Isapres abiertas, durante el primer semestre las aseguradoras de salud que presentaron mayores caídas en sus ganancias fueron Consalud y Cruz Blanca (ver recuadro), precisamente las que van dirigidas a sectores masivos.

De acuerdo a Victoria Beaumont, de la consultora Altura Management, especialista en el área salud, en estos resultados “el primer factor es el aumento en el gasto en prestaciones y licencias médicas. Según la información que se maneja el gasto por ambos conceptos aumentó 11% en el primer trimestre de este año”.

Un ejecutivo del sector salud explica que los afiliados de ingresos medios y bajos suelen ser más siniestrosos que los de ingresos altos en lo que refiere a la solicitud de licencias médicas. Lo anterior se suma a que estos segmentos habrían tenido un aumento importante en la frecuencia de uso de las prestaciones de salud. De este modo, el efecto sería más sobre unas Isapres que sobre otras.

Distintos factores

El efecto de la judicialización es doble, ya que por un lado implica el desembolso de las Isapres para pagar las costas de los casos y por otro, genera menos ingresos al impedirse el alza en los planes.

De acuerdo a la proyección de Beaumont, para 2013 los gastos asociados a los recursos de protección bordearán los 
$ 24 mil millones.

“Estos gastos comprenden las costas, los gastos directos de las Isapres en defensa y los ahorros de los cotizantes que no alzaron sus planes y que por tres años podrían además congelar el precio del GES a pesar que utilicen las nuevas prestaciones”, agrega Beaumont.

Por su parte, Rafael Caviedes, gerente general de la Asociación de Isapres precisa que “son mucho más importantes los gastos judiciales que los menores ingresos por concepto de pago de los planes”.

La tabla de factores

Y a esto se suma el hecho de que este mes se cumplen tres años desde que el Tribunal Constitucional prohibió a las Isapres subir los planes mediante la tabla de factores. “Por lo tanto el mayor gasto esperado por el envejecimiento de la población debe haberse traspasado finalmente al alza de precios base. A ese escenario entonces se suma la judicialización de esta alza lo que estrecha aún más los márgenes de acción de la industria”.

En este punto, una fuente del sector señala que las Isapres más masivas han vendido planes muy baratos. “Y en un principio la frecuencia de uso es baja, pero en la medida que las personas aprenden a usar el plan la frecuencia aumenta. Y hoy en ambos casos la cartera de afiliados está envejecida”, dice el ejecutivo.

Escenario complejo de enfrentar mediante las alzas generalizada que las Isapres pueden realizar anualmente a todos sus afiliados por igual.

Esto, considerando la mayor atención que existe hoy frente a estos reajustes de planes, dado por la publicación del IPC de la salud referencial que hace la Superitendencia de Salud desde este año.

Sumado al hecho de que cada vez más personas acuden a las cortes de apelaciones para interponer recursos de protección en contra de las Isapres para evitar alzas en sus planes.

De hecho, para este año las proyecciones de Altura Management son de 160.000 recursos a nivel nacional, tres veces más que en 2012.

Escenario legislativo

A este contexto su suma además la actual discusión del proyecto de ley que hoy se discute en el Congreso y que busca darle un nuevo marco regulatorio al sistema privado de salud.

De acuerdo al Informe Industria de la Salud en Chile, de la clasificadora ICR, “existe incertidumbre sobre los efectos que la reforma al sistema de Isapres puede llegar a tener, de ser aprobada”.

Y en este contexto, el reporte señala que algunos han estimado que al migrar a una tarifa plana, como propone el proyecto, muchos cotizantes se irán a Fonasa. Específicamente, aquellos que de mantenerse en una Isapre deban pagar una prima mayor a la que pagan actualmente.