La denuncia contra las clínicas privadas que aún exigen pagarés en blanco como garantía de pago encendió el debate sobre los problemas con que se encuentran los usuarios del sistema, donde se aprecian varias cláusulas abusivas en los contratos, siendo el famoso cheque en blanco un actor que aún tiene mucho que decir.

En mayo de este año, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) registró más de 2.700 reclamos contra clínicas privadas, las que se llevaron el 43,6% de las quejas en el sistema de salud.

cuáles son

De acuerdo a la ONG Activa, todavía existen cláusulas que lesionan los derechos de los consumidores, como:

– Cobro en unidades de fomento para las obligaciones contraídas en pesos.

– Renuncia al derecho del usuario, con una firma en blanco, a que rinda cuenta de lo realizado por el prestador de salud con la firma entregada.

– No definición previa de los intereses que serán aplicados a la obligación, lo que dejaría en absoluta indefensión a los pacientes, frente al ejercicio de su derecho constitucional al acceso a las prestaciones de salud.

denuncias a superintendencia

Estos antecedentes fueron entregados a la Superintendencia de Salud este jueves por parte del vicepresidente de la Asociación Chilena de Municipalidades, Christian Vittori y la directora de ONG Activa, Gloria Requena, acompañados por un grupo de personas afectadas por la exigencia de un cheque en garantía.

En este último punto, los usuarios denunciarán la persistente exigencia que aún se hace del cheque en blanco, para los pacientes que ingresan a clínicas y hospitales por urgencia, con lo que se violaría el artículo 141 de la ley Nº 20.394.

cheque en blanco

Vittori señala que, si bien la ley 20.394 eliminó el cheque en garantía cuando una persona requería atención de urgencia, «se está obligando actualmente a los pacientes a firmar un pagaré en blanco ocurriendo lo mismo con el uso del cheque en blanco anteriormente».

Agregó que «se está vulnerando a la ley», ya que un funcionario administrativo «antes de recibir cualquier tipo de atención» exige el pagaré en blanco.

Incluso, según Vittori, se han encontrado con «clausulas abusivas» como que el paciente renuncia a que la clínica le entregue una cuenta sobre lo utilizado con el documento, y la imposibilidad de renunciar a este mandato.

malas prácticas

El senador Gonzalo Uriarte (UDI), también critica la situación, al señalar que “estos pagarés comprenden cláusulas que son abusivas, donde se elimina la opción de reclamar o que de contar la clínica o centro de salud privado un sistema en línea, se verifique la situación comercial del usuario y se niegue la prestación médica solicitada si éste está en Dicom, entre otros puntos”.

“Precisamente, por este tipo de malas prácticas, es urgente avanzar en una legislación que proteja a los usuarios de clínicas e isapres e impida abusos tan burdos como los que ahora vemos. Que después no se quejen», añade.