Ejecutivo busca evitar dudas e interpretaciones que genera hasta ahora la prohibición de reemplazo del «puesto de trabajo».

Por Carlos Agurto.

Tras la arremetida de un sector de la DC integrado por los senadores Andrés Zaldívar, Ignacio y Patricio Walker, que busca hacer explícito el reemplazo en huelga con trabajadores internos, el Ejecutivo estudia alternativas que, manteniendo la prohibición de reemplazo, permitan garantizar que los trabajadores que no forman parte de la paralización sigan efectuando sus labores.

En esa línea, el equipo de asesores de los ministerios de Hacienda y Trabajo tendría lista una indicación que cambiaría la prohibición del reemplazo del “puesto de trabajo” por la del “trabajador”.

Un conocedor de las negociaciones admite que la utilización de este concepto permitiría una mejor interpretación de la norma. “La jurisprudencia que existe hoy es suficiente. Es decir, no se permite el reemplazo interno y quedaría muy bien especificado el mecanismo para garantizarlo”, agrega.

Del mismo modo, se busca especificar de mejor manera el marco en que el empleador podrá realizar las adecuaciones necesarias dentro de la empresa para que esta siga funcionando con los trabajadores que no forman parte de la huelga.

En ese sentido, se apunta a explicitar que el trabajador no podrá realizar labores que no estén consideradas en su contrato y tampoco podrá ser asignado en un lugar de trabajo distinto al de su desempeño habitual.

Sin embargo, el empleador estaría facultado a modificar sus turnos de trabajo y los empleados a realizar horas extras. “Pero esto está limitado, no puedes usar el pacto de horas extras para reemplazar. Eso está explícito como práctica antisindical”, asegura la fuente.

Votos DC

Luego de la irrupción del sector más conservador de la DC en el debate de la reforma laboral, el presidente de la colectividad, Jorge Pizarro, aseguró, tras participar del tradicional comité político de los lunes en La Moneda, que están de acuerdo con algunos de los puntos clave de la reforma como la titularidad sindical y la prohibición de reemplazo externo o interno.

No obstante, agregó que es importante impedir que “no se genere una situación de destrucción de la empresa cuando un grupo pequeño de trabajadores deje de funcionar, poniendo en riesgo la continuidad total y absoluta de la empresa. De manera que estamos buscando una fórmula en que no habiendo reemplazo interno, se asegure la continuidad de la empresa en cuestión”.

Del mismo modo, el senador reconoció que todavía hay una “pequeña diferencia” respecto del quórum para formar un sindicato en las micro y pequeñas empresas (Mipes) y que en materia de negociación interempresa “nosotros hemos comentado que debe ser voluntaria y no obligatoria”.

Con todo, Pizarro dijo que esta reforma es “buena para el país” y el gobierno contará con los votos del partido para aprobarla.