El 55% del total de trabajadores quiere volver al trabajo presencial, porcentaje que sube fuertemente en el segmento C3D, donde el 63% de los trabajadores de este grupo querían o quieren regresar al trabajo presencial.

 

Más allá de la natural preocupación por el contagio, los trabajadores expresan un conjunto de emociones positivas que les produce el haber vuelto o el estar por volver al trabajo presencial. Hay esperanza, alivio, tranquilidad e incluso alegría.

El 55% del total de trabajadores quiere volver al trabajo presencial, porcentaje que sube fuertemente en el segmento C3D, donde el 63% de los trabajadores de este grupo querían o quieren regresar al trabajo presencial.

Por otra parte, si comparamos la Región Metropolitana con Regiones, los trabajadores de la capital asocian la vuelta al trabajo presencial a emociones más negativas.

 

Las medidas de prevención frente al Coronavirus adoptadas por las empresas para el retorno seguro son muy bien evaluadas por los trabajadores. Entre quienes ya volvieron, el 59% evalúa las medidas de protección como satisfactorias y muy satisfactorias, mientras los que están por volver le asignan un 46% de satisfacción.

Los encuestados responden que sus empresas han adoptado un conjunto robusto de medidas de prevención. El 77% de los que ya volvieron a trabajar recibe mascarillas y otros artículos para prevenir contagios. El 60% dice que en su empresa se han establecido controles de temperatura; el 49% que se han diferido los horarios de entrada y el 41% que hay sistemas de turnos. Quienes están ad portas de trabajar conocen en mucho menor porcentaje las medidas específicas de sus empresas.

Lo que los trabajadores más valoran de volver al trabajo presencial es la tranquilidad de contar con un trabajo estable. Aunque para todos los segmentos esto es lo más importante de volver, en el segmento medio bajo, el porcentaje que así lo estima llega al 63%, notoriamente más alto que en los segmentos medios y medios bajo.

Independiente de si han vuelto a trabajar o están ad portas de hacerlo, en las mujeres prima la preocupación, el miedo y la angustia y mayoritariamente (61%) hubiesen preferido esperar más tiempo para retornar a la rutina pre Covid. Esto podría explicarse principalmente porque más allá de la tranquilidad que puede generar volver al trabajo, estamos hablando de jefas de hogar que deben cumplir con varias funciones: trabajar, cuidar de sus hijos que aún no vuelven al colegio y/o personas mayores, que hoy son población de alto riesgo.

Entre los que ya dieron el paso y volvieron a sus labores en forma presencial, además de la sensación de estabilidad laboral, volver a la rutina, al trabajo en equipo y ver a los compañeros, son los elementos más destacados por los encuestados.

Fuente: La Cuarta