Expertos llaman a poner especial foco en la ventilación de los hogares y evitar reunirse en espacios cerrados. Prevenir cuadros graves de «otros virus» también evita una repercusión en la ocupación UCI, enfatizan.

El frío, la contaminación ambiental y la circulación viral. Esos son los tres factores enumerados ayer por el ministro de Salud, Enrique Paris, que podrían ir en contra del control de la pandemia, que por estos días deja números más optimistas, pero que aún debe enfrentarse al desarrollo del invierno en Chile.

Citando los informes de circulación de virus respiratorios del Instituto de Salud Pública (ISP), el titular de Salud señaló que allí se detalla que en los últimos dos años, «la circulación de los virus no coronavirus es muy baja. Es decir, si nosotros teníamos habitualmente 20 mil casos de infecciones por virus respiratorios en el país, el año pasado solamente hubo 1.100 y este año llegan hasta el momento a 138. Lo que está circulando predominantemente, y así ocurrió el año pasado, es el coronavirus», destacó.

En efecto, al observar el último reporte del organismo, con fecha 29 de junio, correspondiente a la semana 25, se detalla que para 609 casos analizados para virus respiratorios, el 1,8% de ellas resultaron positivas -siete Virus Respiratorio Sincicial (VRS) y cuatro Adenovirus-, comportamiento inferior a la semana 24 de 2021 (3,2%). En orden de predominancia en la detección, está: Adenovirus (43%), VRS (36%), Parainfluenza (17%), Metapneumovirus (3%) e Influenza B (1%).

Respecto a coronavirus, el informe señala que «en las muestras recibidas para análisis de RT-PCR de SARS CoV-2 en el ISP procedentes de Santiago, se observa un descenso en los casos positivos confirmados. Un 33% de las muestras procesadas corresponden a pacientes asintomáticos de búsqueda activa». De hecho, esta jornada, el Minsal reportó 1.885 nuevos casos, la cifra más baja desde el 27 de diciembre de 2020, es decir, en 191 días. Considerando esta cifra, los casos nuevos de los últimos 7 días promedian 2.985, versus 4.037 de la semana anterior.

Ante este escenario de números más optimistas, y el transcurso del invierno, expertos enfatizan en que ventilar es clave, además de que si bien los registros de circulación de otros virus es baja, los paulatinos desconfinamientos pueden aportar a una mayor circulación de los mismos, los que no están exentos de generar cuadros graves.

Uso de mascarilla

Sin embargo, el frío es un factor al que ponerle atención durante esta época. Esto, porque según explicó Paris «porque al producir vasoconstricción de la mucosa nasal, obviamente que llegan menos defensa a esa mucosa y los virus pueden penetrar con más facilidad».

Frente a este punto, el Jorge Jorquera, broncopulmonar de la Clínica Las Condes, plantea que el uso de mascarilla es clave, no sólo porque en la actualidad nos previene de contagios de covid-19, sino porque «también nos sirve para aumentar la temperatura en la zona de la boca, considerando que el frío en la Región Metropolitana es muy seco. Además, aumenta un poco la humedad, impidiendo que el frío no entre de manera tan profusa en la vía aérea».

«De hecho, la relación que existe entre el frío y las infecciones respiratorias es eso: si estamos en un ambiente de baja temperatura, las vellosidades que tenemos en la vía aérea superior, los cilios se paralizan, por lo tanto no cumplen la función de eliminar las bacterias o virus que puedan entrar a la vía aérea», complementa el especialista.

Efecto de la contaminación

Un segundo factor que destacó ayer la autoridad sanitaria fue la contaminación ambiental a la que estamos expuestos. «Si hay material particulado, sobre todo irritante -2,5- o asociado a gases irriantes, como derivados del azufre o nitrógeno, eso produce una irritación de la vía respiratoria, es como si uno tuviera una herida, y eso también permite la entrada de los virus respiratorios», dijo Paris.

Este material particulado que puede venir también de las construcciones o demoliciones, o de la vía pública en general, «no es estacional, lo tenemos todo el año, aunque aumenta un poco cuando hay más humedad ambiental», aclara la doctora Isabel Largo, especialista en enfermedades respiratorias de Clínica Universidad de los Andes.

Por eso, aclara, «es importante que si una persona se queda en su casa, es mejor que esté bien abrigado y que no sume otros contaminantes al interior de su hogar, como estufas a parafina, leña o gas, considerando que no todos pueden acceder a una calefacción eléctrica».

Ventilar es clave

«Es muy importante lo que hemos dicho nosotros varias veces, la ventilación, vacunarse contra la influenza y contra el coronavirus. La diseminación viral se combate con la vacuna y además con las medidas que repetimos siempre: mascarilla, distanciamiento físico y sobre todo, la ventilación en invierno, aunque haya un poco de frío», complementó Paris.

El doctor Jorquera plantea que «cuando uno veía que aumentaba la tasa de infecciones virales en la época pre pandemia era por el hacinamiento, muchas personas en el mismo lugar con poca ventilación permitía que los virus se transmitieran más fácilmente, y hoy día con covid es aún más riesgoso, porque esta enfermedad produce más mortalidad y la consecuente mayor ocupación de camas críticas».

Por eso, la recomendación es poner especial acento en ventilar los espacios. «Con 5 minutos es suficiente y procurar ventilar de forma intermitente dos o tres veces al día», enfatiza.

Asimismo, la doctora Largo enfatiza en que con la liberación de algunas medidas restrictivas, hay que poner aún más atención, pues «los niños ya están teniendo infecciones respiratorias habituales en esta época, y el problema es que los virus con los que se contagian, por ejemplo, en los jardines infantiles, luego son llevados a sus casas y contagian a sus hermanos». Asimismo, en concordancia con el doctor Jorquera, recuerda que estos cuadros pueden agravarse, «y si necesitan UCI, quizá puedan ocupar una cama que necesita una persona covid grave».

Fuente: Emol.com