Año a año, las cifras sobre la salud mental de los chilenos muestran alertas cada vez más preocupantes y cada tanto leemos en la prensa que esta progresión no para. En 2016, la OMS publicó un reporte donde pone a nuestro país como el más depresivo en el mundo, con el 17,5% de los chilenos padeciendo de depresión y siendo causa del 26% de las licencias médicas anuales. Pero por otro lado, el World Hapiness Report (Reporte Mundial de la Felicidad, 2017) pone a Chile como el más feliz de Sudamérica, en la posición número 20 del mundo. ¿Es esto compatible?