Las palabras del ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, respecto de la reforma a las isapres dejaron una sensación positiva entre las aseguradoras.

El secretario de Estado sostuvo el martes ante la comisión de Salud del Senado que se está trabajando en dos propuestas, y que la Presidenta Michelle Bachelet definirá cuál se envía al Congreso.

La primera sería una versión simple, que aborde los problemas de falta de movilidad y discriminación en el sector, mientras la segunda iría más allá e implicaría «algo de mancomunación», según Valdés. Es decir, reunir parte de la cotización obligatoria tanto de los afiliados a isapre como de Fonasa.

Y tanto Valdés como la ministra de Salud, Carmen Castillo, plantearon que crear un fondo mancomunado -que estaba en la idea inicial de la reforma- requerirá de aporte fiscal, debido al traspaso de beneficiarios hacia Fonasa que podría generar, y la idea es que los cambios impliquen el menor gasto estatal posible.

Ante esto, el gerente de Desarrollo de la Asociación de Isapres, Gonzalo Simón, dijo que «parece que el Gobierno está comprendiendo que lo que se necesita es una ley corta, que dé viabilidad al sector, resuelva la judicialización, dé transparencia (…) y haya movilidad entre las isapres».

La opción de ley corta ha sido planteada antes por las aseguradoras debido a la constante alza de recursos de protección, que en 2015 totalizaron 133 mil juicios. Asimismo, estas se han manifestado en contra de la creación de un fondo común entre isapres y Fonasa.

«Se está entendiendo la necesidad de avanzar en los temas más urgentes, para darle sustentabilidad a un sistema que atiende a 3,3 millones de afiliados sin necesidad de contar con un aporte fiscal», sostuvo Marcelo Dutilh, gerente general de Consalud.

Su par de Colmena, Luis Romero, valoró las palabras de Valdés, «porque dan cuenta de que Hacienda ha hecho un diagnóstico acertado y ha visto que la reforma, tal como estaba planteada, ponía en riesgo no solo la continuidad del sector privado, sino también la sustentabilidad del sistema».

Desde Cruz Blanca, en tanto, afirmaron que «recibimos con tranquilidad las señales entregadas recientemente por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés. Esta fórmula, además, es la única vía para darle sostenibilidad en el mediano y largo plazo a los sistemas de salud».

Un proyecto viable

Eso sí, entre las aseguradoras «hay un grado de preocupación en el sentido que no se establecieron fechas», dijo Simón.

Al respecto, el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, afirmó que «tenemos que aprender la lección de los proyectos anteriores que no llegaron a destino y asegurarnos de tener ahora un proyecto viable, política y técnicamente».

De hecho, parte del trabajo que se está realizando ahora con Hacienda es corregir elementos de la propuesta elaborada por el Ministerio de Salud. «Cada vez que las ideas se socializan se generan dudas de las que hay que hacerse cargo», dijo Pavlovic, aunque aclaró que «las respuestas que buscamos son para mejorar la situación de los afiliados, no de las isapres».

Pero el académico de la U. Andrés Bello, Manuel Inostroza, afirma que «el trabajo previo fue de mala calidad, lo que hace que Hacienda tome la conducción técnica del proyecto», y dice que «en vez de ir por el camino de gradualidad se plantea una disyuntiva que habla de un proyecto muy cosmético, de corto alcance, versus un proyecto que nos gustaría, pero no podemos. La respuesta a esa disyuntiva va a ser obvia».

 

Fuente: El Mercurio