De las 345 comunas del país, 224 tienen deudas con la Central de Abastecimiento del Ministerio de Salud (Cenabast), que es el organismo a través del que compran los medicamentos e insumos para los consultorios de atención primaria.

Los pasivos totales de las comunas suman $7.519 millones, según un informe de Cenabast fechado el 29 de diciembre, y entre los deudores se cuentan al menos 46 de las comunas que han manifestado públicamente su interés por contar con una farmacia municipal, siguiendo el ejemplo de la instalada en Recoleta en octubre pasado.

De hecho, esta comuna también debe dinero (poco más de $25 millones), al igual que San Ramón (casi $30 millones) y Viña del Mar ($514 millones, solo superada en el monto por Cerro Navia, con $538 millones).

Teóricamente, las comunas no deberían tener ninguna deuda por medicamentos, pues el Ministerio de Salud entrega un monto mensual por cada uno de los inscritos en los consultorios que administran los ediles. Sin embargo, estos últimos aseguran que las deudas existen porque ese financiamiento estatal no alcanza para cubrir los costos reales de atender la salud de la población.

Sin embargo, parte central para que funcione el modelo de «farmacia popular» es que los municipios puedan acceder a los precios que obtiene Cenabast en sus licitaciones, -en las que se consigue un precio de cerca de un 30% menos que si un ente público comprara los mismos medicamentos a través de Chilecompra. Así se obtendría una ventaja en el precio para los potenciales usuarios.

Según expuso el director de Cenabast, Pablo Venegas, ante la comisión investigadora sobre medicamentos de la Cámara de Diputados, a partir de ahora, los municipios que quieran acceder a las compras agregadas que puede hacer Cenabast deberán acordar un plan de pago con el organismo para poder sumarse.

«De los $7.500 millones, más de $6.000 millones corresponden a deuda de más de 365 días», dice Venegas, quien explica que «Cenabast no tiene espaldas financieras para asumir estos niveles de deuda, que al final nos impiden hacer una mejor gestión».

En total, a Cenabast le adeudan poco más de $35 mil millones, puesto que además de los municipios se suman hospitales, servicios de salud y otros clientes públicos. Y a su vez, el organismo adeuda $43 mil millones, a un total de 59 acreedores, principalmente laboratorios farmacéuticos.

El alcalde de Lo Barnechea, Felipe Guevara, presidente de la comisión de salud de la Asociación de Municipios de Chile, cree que «es razonable que Cenabast exija pago a los clientes. Lo que no parece razonable es que exija mayor prontitud en los pagos y no ofrezca mejora en los servicios».

Sin embargo, Guevara cree que debe evaluarse mejor la fórmula para comprar, porque «el modelo de Recoleta es malo. No me digan que no está subsidiado, si en tres meses ha entregado ayuda a 300 personas. Eso significa tres personas al día. Ni un kiosco se sustenta con eso».

 

Fuente: El Mercurio