Desde la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) aseguraron que el dictamen de Contraloría, que obliga al gobierno a retomar el modelo de concesión para construir el nuevo hospital Sótero del Río, es una buena instancia para edificarlo de manera más eficiente, criticando que existe “un factor ideológico” en la apelación a esta resolución.

“Nos parece razonable que el dictamen reafirmara que el proceso de concesión continuara, ya que los argumentos esgrimidos por la autoridad (Minsal) no eran sólidos, porque la adjudicación estaba de acuerdo a la normativa vigente y correspondía seguir con el proceso”, aseveró Carlos Piaggio, gerente de Infraestructura de la Cámara Chilena de la Construcción, quien agregó que “sólo creemos que sería mucho más factible que no se espere a 2017 para recién licitarlo, de acuerdo al cronograma que maneja el Ministerio de Salud”.

Además, advirtió que estos cambios en el modelo de construcción ponen en riesgo la inversión extranjera. “Podría generar un daño a la imagen del país, dado que no se respetó la certeza jurídica y eso podría mermar la credibilidad de los inversionistas extranjeros”, aseguró.

Por su parte, en el Minsal optaron por acudir al equipo jurídico del ministerio de Obras Públicas (MOP), entidad mandante que presentará un nuevo requerimiento en el ente contralor, con el fin de aclarar los puntos discutidos, y que echaron pie atrás con el contrato que se había adjudicado la empresa española Ferrovial, que en marzo de 2014 se había adjudicado el proyecto, por un monto cercano a los US$1.900 millones.

 

Fuente: Estrategia