Hotelería presenta el menor nivel de satisfacción según Randstad:

Buenas remuneraciones, bajos niveles de despido y la constante negociación de beneficios, son algunas de las condiciones que explicarían estos resultados. En todo caso, expertos advierten que el término no es sinónimo de felicidad laboral y que no tiene los mismos efectos en la productividad.

Por María de los Ángeles Pattillo.

¿Qué tan satisfecho está, en general, con su actual labor? Esa fue la pregunta que Randstad hizo a 405 trabajadores de los principales rubros de la economía chilena, y con niveles de formación secundaria, técnica y universitaria. En el catastro, la industria del agro y pesca fue la que reunió el mayor número de empleados que declararon estar muy satisfechos o satisfechos, con un 78% (ver infografía).

Francisco Orrego, presidente de la Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca), estima que en su caso estos resultados se explicarían por el alto nivel de sindicalización del sector, que según sus cálculos bordea el 90% de las planillas. «A esto se suman canales de diálogo que permiten gozar de muy pocos escenarios de conflicto».

Otro factor que Orrego identifica como determinante es el nivel de remuneraciones. Según un estudio realizado en abril de este año a 22.460 empleados afiliados a la ACHS, el sueldo promedio a nivel nacional era de $672 mil. En el rubro pesquero, la cifra llega a $693 mil.

«La satisfacción de un trabajador va a depender de qué tan fuerte perciba a su compañía y también al rubro donde esté. El escenario económico influye mucho y la solidez genera tranquilidad», señala Rita González, CEO de Randstad en Chile.

La actividad agrícola, por ejemplo, se percibe como de las más dinámicas en el actual escenario de bajo crecimiento. Según el último informe de empleo del INE del trimestre móvil julio-septiembre de 2015, el agro creció un 2,9% en número de trabajadores ocupados respecto del mismo período del año anterior. Así, en 12 meses se sumaron a la fuerza laboral en esta industria 18.170 personas, llegando a los 652.240 ocupados.

Por su parte, Orrego destaca que las empresas del rubro pesquero si bien no han crecido en mano de obra, tampoco han ajustado su dotación, a pesar de la desaceleración económica. «Hasta ahora hemos aguantado, evitando entrar en ese ciclo a pesar del actual cuadro de estrechez económica y las reducciones de cuotas de pesca».

En todo caso, Rita González agrega que el dólar alto ha beneficiado a ambas dos actividades que tienen un fuerte componente de exportación: «Eso da a las compañías más margen de maniobra para generar prácticas y políticas relacionadas con la satisfacción de los colaboradores», precisa.

Escenario en construcción podría cambiar en 2017

Otro sector que supera la barrera del 70% de satisfacción es la construcción. Según la encuesta de Randstad, el 76% de los trabajadores de esta industria se declara satisfecho o muy satisfecho con su puesto actual.

Jorge Mas, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), destaca que la cifra coincide con mediciones internas y, tal como en la pesca, lo atribuye en parte al contexto salarial: «En la última década hemos tenido un alza continua de remuneraciones. Si el crecimiento real del país ha sido de 33%, el sector construcción subió un 55% en ese lapso».

Asimismo, se repite la condición de bajos niveles de despido. «En los últimos años ha habido una actividad importante y una alta demanda por trabajadores, sobre todo en el área de vivienda, que es un gran demandador de personal», agrega Mas.

Un tercer elemento que incidiría en los buenos resultados del rubro, indica el presidente de la CChC, es que por lo general las condiciones y beneficios son mejores que los de otras industrias, ya que se negocia por obra. Además, es habitual que los trabajadores se mantengan en la construcción y desarrollen toda su carrera ahí.

Con esto, no es de extrañar que el nivel de conformidad en la construcción haya subido de forma constante desde 2012 a la fecha. Según el estudio de Randstad, si hace tres años el 50% de los trabajadores se declaró muy satisfecho o satisfecho, en esta última versión la cifra llega a 76%.

Sin embargo, Rita González advierte que en las próximas mediciones la tendencia podría cambiar: «La inversión privada en construcción tiene un dinamismo puntual dado el cambio tributario que se viene en las viviendas, por lo que habrá que ver cómo se sigue comportando». Jorge Mas coincide con esta visión y advierte que en 2017 podría caer la demanda por empleo en el sector.

26 puntos ha subido el nivel de trabajadores muy satisfechos y satisfechos en la construcción, al pasar del 50% al 76% en tres años.

66% de los empleados a nivel nacional se declara satisfecho o muy satisfecho. Chile queda así en el puesto 10 de un ranking en que Turquía ocupa el primer lugar, con 71%.