Esperarán a analizar en detalle las indicaciones al proyecto de ley para pronunciarse sobre estas:

El comité de las seis ramas de la CPC se reunió ayer para aunar posturas. Ello, luego que el fin de semana criticaran los ajustes propuestos por el Ejecutivo.

Por S. Celedón, M. Penaforte y M. Fernández.

En una reunión de emergencia a primera hora de ayer, las ramas de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) decidieron cambiar su estrategia para enfrentar la tramitación de la reforma laboral y las recientes indicaciones presentadas por el Ejecutivo. ¿El objetivo? Sacar al empresariado de las «trincheras» en la discusión y hacer prevalecer una «postura más dialogante» con el Gobierno y los parlamentarios, dado que la iniciativa inicia ahora una fase clave de revisión del proyecto en la Sala del Senado, afirman distintas fuentes gremiales.

Por ello, el primer paso fue moderar las críticas a las indicaciones y cuadrar a sus seis ramas tras este enfoque. Esto marca un cambio respecto del fin de semana, cuando todos los gremios salieron a cuestionar -algunos duramente- los ajustes al proyecto.

Ayer, en cambio, todos los gremios de la CPC acordaron analizar primero en detalle las más de 60 indicaciones, para luego hacer un pronunciamiento. Aun así, en una declaración pública afirmaron: «Con la información disponible entregada hasta ahora por el Gobierno, las indicaciones podrían significar un retroceso respecto al proyecto despachado en primer trámite constitucional, agravando aún más sus efectos negativos».

Se posterga declaración

Antes de definir esta nueva estrategia, el domingo la Sofofa había convocado a una conferencia de prensa para ayer lunes a las 11 de la mañana del Frente Empresarial, instancia que integran todas las ramas de la CPC, más otros gremios, como Asech y Conapyme. En el encuentro se entregaría una «declaración conjunta» sobre los cambios propuestos al proyecto. Sin embargo, una hora antes de la actividad, esta se suspendió. Luego, 40 minutos después, se informó que sí se realizaría, pero solo con la presencia de la Conapyme, la Asech y otros gremios. Ya no la Sofofa ni otras ramas de la CPC (ver recuadro).

El cambio radicó, precisamente, en la convocatoria al comité de emergencia de la Confederación, reunión en que se acordó esperar el análisis de las indicaciones. Por ende, antes de este martes -en que se reunirá el comité laboral de la CPC- no habría pronunciamientos.

Patricio Crespo, quien preside la SNA -y que esta semana ejercerá como vicepresidente de la CPC, ya que Alberto Salas se encuentra de viaje-, resumió así el cambio de planes: «Seguimos siendo aliados con el Frente Empresarial, pero era imprudente ser parte de una conferencia cuando aún no hemos realizado un estudio reposado y decantado de las indicaciones».

A su vez, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, y de Trabajo, Ximena Rincón, insistieron ayer en criticar las «opiniones destempladas» de algunos dirigentes gremiales.

Valdés dijo que las indicaciones son muestra de un esfuerzo para tener «un proyecto equilibrado». En este sentido, sostuvo que la iniciativa «trata de buscar equilibrios», por lo que no es su afán «caricaturizar esto en buenos y malos. No es un partido de fútbol en que unos ganan y otros pierden».

Indicaciones
Más de 60 indicaciones ingresó el Ejecutivo a la reforma laboral.