De las encuestadas que acusan un impacto en su calidad de vida, el 65% señala que se siente más cansada, un 13% advierte sobre un deterioro en su productividad y otro 12% describe falta de concentración.

Por Carlos González Isla.

Según una encuesta de la firma Laborum.com, las mujeres son las más afectadas con la mantención del horario de verano durante todo el año. De acuerdo al sondeo, el 59% dijo que le trajo problemas en su vida, a diferencia de los hombres que solo en un 44% manifestaron inconvenientes con la medida del gobierno.

La extensión del horario de verano ha estado en la agenda, en especial porque las personas deben salir a oscuras a sus lugares de trabajo o estudios.

La medición se realizó vía mailing, entre el 10 y el 16 de junio, y se aplicó a 270 personas de todo el país, un 60% de ellas con título universitario o postgrados.

De las mujeres que acusan un impacto en su calidad de vida, el 65% señala que se siente más cansada, un 13% advierte sobre un deterioro en su productividad y otro 12% describe falta de concentración, entre otras consecuencias.

“No digo que los hombres no cumplan un rol, pero a la mujer le afecta más por la polifuncionalidad que cumplen en las mañanas, en especial si son mamás y con el tema del colegio”, dice María Angélica Zulic, gerente general de Laborum.com.

Los factores que están complicando la adaptación de los trabajadores son las bajas temperaturas y la poca luminosidad. A lo que se suma la adaptación a una modalidad horaria en la que nunca habían vivido, explica Zulic.

“No hay que creer que la jornada laboral partió cuando encendiste tu computador. Tienes que despertar y eso significa concentrarse, pero con este nuevo sistema horario la concentración está disminuida”, advierte la especialista.

El sondeo se realizó a personas, entre los 18 y 60 años, que trabajan. Todos, en distintos porcentajes dicen sentirse afectados y el cansancio es la principal consecuencia. Los mayores problemas los reportan los tramos entre los 30 y 40 años, con un 52% y entre los 41 y 50 años con un 54%.

A nivel general, la encuesta arrojó que un 50% de los trabajadores se siente afectado por el cambio de horario. De los cuales un 57% se siente más cansado, un 17% menos productivo, un 17% menos concentrado, un 8% con más ansiedad y un 1% con trastornos alimenticios.

“Estas cifran revelan que hay mucha dificultad de adaptación al trabajo diario”, insiste Zulic.

El 50% que no se siente afectado por la medida, plantea en un 69% que ésta no ha alterado en nada su rutina diaria, otro 27%, incluso dice que tiene más tiempo para realizar sus tareas y un 4% se siente más descansado y con energía.

Según ha señalado el ministro de Energía, Máximo Pacheco, este horario se mantendrá, por lo menos, hasta 2017, año en que vence el decreto que estableció la medida.

Zulic cree que es un error mantenerlo. “¿Cómo vas a generar productividad si partimos dormidos en la mañana?”, dice.