Regulador pone en consulta proyecto normativo que busca fortalecer los gobiernos corporativos:

La propuesta de la Superintendencia de Valores pretende elevar el estándar de las sociedades anónimas chilenas, que hasta ahora podían entregar respuestas vagas y generales ante las consultas de la entidad. Adopción de esta normativa será voluntaria.

Por NICOLÁS MARTICORENA.

La Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), liderada por Carlos Pavez, puso ayer en consulta un proyecto normativo que busca fortalecer los gobiernos corporativos de sociedades anónimas abiertas. La iniciativa busca reemplazar la actual norma sobre la materia, tras determinar que las empresas que operan en el país no estaban respondiendo de forma pertinente a las consultas del regulador.

La normativa vigente, impulsada por el ex superintendente Fernando Coloma, permitía que las empresas respondieran las consultas de la SVS con generalidades meramente formales. En cambio, la propuesta regulatoria incluye una mayor desagregación de las prácticas que aplican los gobiernos corporativos de las sociedades anónimas abiertas, en temas relevantes como conflictos de interés y gestión de riesgo, entre otros. Esto ayudaría a evitar conflictos como los exhibidos en el caso La Polar o Cascadas. Además, controlaría el uso indebido de información privilegiada en la compañía.

«Pediremos que (las sociedades anónimas) detallen sus prácticas de modo que la información entregada no implique solamente cumplir con la formalidad de la norma», dijo el superintendente Pavez.

El proyecto busca perfeccionar la información que reportan las sociedades anónimas al mercado local en materias de gobierno corporativo y fomentar la difusión de información a los accionistas y público en general respecto de las políticas, prácticas y efectividad de las mismas, en materia de responsabilidad social y desarrollo sostenible.

Si bien la adopción de estas prácticas no es obligatoria, la idea de la SVS es que se generen incentivos para que los inversionistas (como las AFP) tomen sus decisiones de inversión privilegiando aquellas sociedades en que sus intereses estén mejor resguardados, sin perjuicio de los riesgos propios asociados a las actividades o giros de negocios que desarrolle la sociedad.

Entre las principales propuestas de la SVS destaca la exigencia de explicitar el tratamiento de los conflictos de interés y los procedimientos de actualización del código de conducta de los directorios; y fortalecer y promover los canales de denuncias internos en las sociedades ante eventuales irregularidades detectadas por el personal de la compañía.

También destaca permitir prácticas intermedias que fomenten la votación remota y participación en tiempo real en las juntas de accionistas; y mejorar la calidad y confiabilidad de la información contenida en la autoevaluación de los directorios, mediante la evaluación de un tercero ajeno a la sociedad.

Tras conocerse el documento, el ex titular de la SVS Alberto Etchegaray valoró el que sea un proyecto de alta exigencia y dijo que la propuesta pide que la compañía explicite de manera conceptual y con ejemplos sus conflictos de interés, contando con un procedimiento para que cada director pueda declararlos y resolverlos. Además, pide designar permanentemente un responsable interno del monitoreo del cumplimiento del código de conducta de los directores. «Es un estándar de cumplimiento bastante alto, que obligará a las compañías a contar con una institucionalidad que responda a estas exigencias», aseguró.

En tanto, Matías Zegers, director del Centro de Gobiernos Corporativos de la Universidad Católica, dijo que la iniciativa aporta antecedentes a los inversionistas, pero que no mejora cabalmente el tema de la autorregulación. «Ello debería venir más por parte de las bolsas, para que incorporen un índice que mida los estándares de gobiernos corporativos», dijo.

«Pediremos que (las sociedades anónimas) detallen sus prácticas de modo que la información entregada no implique solamente cumplir con la formalidad de la norma».

CARLOS PAVEZ
Superintendente de Valores y Seguros

«Es un estándar de cumplimiento bastante alto que obligará a las compañías a contar con una institucionalidad que responda a este tipo de exigencias».

ALBERTO ETCHEGARAY
Ex titular de la SVS.

«La iniciativa es buena, pero no mejora la totalidad de la problemática de la autorregulación. Ello debería venir más por parte de las bolsas».

MATÍAS ZEGERS
Experto en gobiernos corporativos.

EFECTO

La propuesta ayudará a evitar problemas como el uso de información privilegiada.