Se trata de $1.270.323 por los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2014, equivalente al 10% del sueldo base de los socios, que es la cuota que debe cancelar el plantel.

Por Fabiola Cadenasso.

Pese a que la rectora de la Universidad Arcis, Elisa Neumann, tiene todas las esperanzas puestas en un préstamo internacional para resolver la grave crisis financiera que atraviesa el plantel, hoy jueves un nuevo antecedente se suma a la cuantiosa deuda, porque la Dirección del Trabajo demandó a la institución por no cancelar las cuotas al sindicato de trabajadores.

Se trata de un monto que asciende a $1.270.323 por los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2014, equivalente al 10% del sueldo base de los socios, que es la cuota que debería cancelar la casa de estudios.

La información fue corroborada desde el sindicato a través de su tesorera Jacksa Suazo, quien aseguró que «la Dirección del Trabajo al constatar que no se ha pagaba por parte de la institución la cuota sindical decidió pasar este caso a tribunales, por una tutela por derechos fundamentales y practica antisindical».

Las partes fueron citadas a un comparendo el 5 de enero y el próximo 19 de marzo se realizará la audiencia preparatoria en el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo.

Para esa fecha, comentó Suazo, la Universidad deberá tener pagada íntegramente las cuotas sindicales, desde el mes de octubre de 2014 hasta la fecha.

De lo contrario, según consigna en la resolución de la Corte, Arcis arriesga una multa de 50 a 100 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), la que según ordena la demanda, «podrá repetirse hasta obtener el cumplimiento de la medida decretada».

El plantel, en tanto, argumentó que «la razón de este hecho es la situación económica por la que atraviesa la institución», agregando que «no se han pagado las remuneraciones de esos meses».

La situación para Suazo es paradójica, ya que desde el ministerio de Educación y del Congreso, se determinó que no hay mayores falencias de la institución, pero las pruebas dicen todo lo adverso.

«Todos se han visto con la soga al cuello y prácticamente por la boca muere el pez, por lo tanto todos esos dichos, de lo que se alcanzó a conocer de la investigación del Mineduc, como la de los personeros políticos que decían que no habían irregularidades en la Arcis, han quedado volcadas en la demostración que es absolutamente lo contrario, de que sí hay irregularidades y de que la situación es insostenible», afirmó.