Asimismo, según la encuesta del Banco Central, un 57% de los consultados prevé un crecimiento del PIB igual o menor a 3% para 2015.

El Banco Central (BC) ha insistido en que está tranquilo en materia inflacionaria. A pesar de que el indicador bordea el 5% en doce meses, el BC considera que se debe a un efecto transitorio, toda vez que las proyecciones del mercado a largo plazo se mantienen ancladas.

No obstante, la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) del propio ente rector reveló que a 11 meses plazo la mediana de las respuestas de los agentes privados se ubica en 3,3%, sobre la meta de 3% del instituto emisor.

Más aún, en torno a un 38% de los consultados prevé que el Índice de Productos al Consumidor (IPC) tendrá una variación anual igual o mayor a 3,5% a septiembre del próximo año, aunque de todas formas convergiendo a 3% al mismo mes de 2016.

De acuerdo con los expertos, el repunte de las expectativas responde al alza estacional del IPC en los últimos meses y sólo implicaría que la convergencia al 3% podría demorar más tiempo.

“Claramente hay una visión más inflacionaria en el mediano plazo y es una señal de alerta; pero la expectativa más importante es a 24 meses plazo, por lo que sólo implicaría algo a monitorear con cuidado”, señala Fernando Soto, economista de BBVA Research .

Comparte este juicio Nathan Pincheira, economista de Banchile Inversiones, quien sostiene que “en términos rigurosos el anclaje de expectativas, según el objetivo del BC, es a 24 meses, y éste ha estado anclado en 3%. Ahora, a un año claro que hay volatilidad, pero muy afectado por las sorpresas estacionales de los últimos dos meses, por lo que la convergencia hacia el 3% podría demorarse un poco más de lo que se tenía pensado en algún momento, pero lo que no está en entredicho es que existirá esa convergencia. Sólo que demorará más”.

Por su parte, Antonio Moncado, economista de BCI Estudios, apunta que “esto se debe solamente a factores netamente estacionales y a los abultados registros de inflación de septiembre que afectan las expectativas de los agentes económicos. Sin embargo, hay varios factores para pensar que la inflación debiera tender a converger al rango de tolerancia en 2015, por lo que no veo que haya presiones inflacionarias que sean persistentes”.

En tanto, el sondeo del Banco Central dio cuenta que en materia de actividad un 57% de los encuestados anticipa un crecimiento igual o menor al 3% para el próximo año, lo que a juicio de los economistas se debería a un arrastre de las malas perspectivas para 2014, que ya apuntan a algo por debajo del 2%.

“Nosotros esperamos un 3,2% para el próximo año, donde obviamente se van arrastrando los sentimientos negativos en términos de ir bajando las expectativas para este año, y eso se traspasa hacia el próximo”, señala Pincheira.