Rodrigo Vergara, presidente de la institución, presentó Informe de Política Monetaria al Senado:

Prevé una caída de 4,1% en la inversión y una inflación anual que se mantendrá sobre 4% el resto del año. Pronostica una recuperación gradual de la actividad a partir del último trimestre y una expansión de 3% a 4% en 2015.

Por LINA CASTAÑEDA.

Hace un año, el Banco Central estimaba que la economía chilena crecería entre 4% y 5% en 2014, pero hoy proyecta que el crecimiento se ubicará entre 1,75% y 2,25%.

«La fuerte reducción del crecimiento es, sin duda, una noticia preocupante, que debe mover a todos los actores, políticos y económicos, a redoblar los esfuerzos para devolver el dinamismo a la economía chilena», dijo el presidente del instituto emisor, Rodrigo Vergara.

La fuerte revisión a la baja también se concentra en la inversión, para la cual prevé una caída de 4,1% este año, lejos de la variación positiva de 4,5% que pronosticaba hace un año.

Para el consumo la proyección de crecimiento bajó a 2,6%.

Vergara presentó el Informe de Política Monetaria (IPoM) en su reporte anual al Senado, sesión que fue presidida por Eugenio Tuma. No solo factores externos explican esta desaceleración, sino también factores internos sorpresivos cuyo impacto es más difícil de precisar, dijo Vergara (ver recuadro).

El escenario central contempla que la inflación continuará situándose sobre 4% en lo que resta del año, para llegar en diciembre de 2015 a 2,8%.

Así también, prevé una recuperación gradual de la economía en el último trimestre para llegar a una expansión entre 3% y 4% el próximo año. Dicha recuperación se sustenta en: el mayor impulso monetario y las menores tasas de mercado; un mayor impulso fiscal; el crecimiento de los socios comerciales y la depreciación real del peso, y una mejora de las expectativas privadas.

El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, llamó a ver con optimismo el futuro de Chile y a cuidar las expectativas. Destacó que el IPoM confirma que hay un punto de inflexión en este ciclo y que el momento que está viviendo nuestra economía es transitorio. «Las proyecciones hablan de que en 2015 vamos a enfrentar mejores cifras en inversión, en consumo y en demanda interna», subrayó.

Desde octubre de 2013, el Banco Central ha reducido la tasa de interés de política monetaria (TPM) en 150 puntos base a 3,5%. Sin embargo, Vergara dijo que si bien la política monetaria es una herramienta poderosa, «puede amortiguar, pero no compensar totalmente las fluctuaciones cíclicas». Si se busca mayores tasas de crecimiento en el mediano plazo, enfatizó que serán necesarias medidas que fomenten la inversión en capital físico y humano y un mayor dinamismo de la productividad, elementos que están más allá de la política monetaria.

PESO MÁS FUERTE

Como supuesto de trabajo, el informe prevé una leve apreciación del tipo de cambio real en el largo plazo.

«No solucionaremos nuestros problemas basados en la desconfianza».

«El desafío de todos hoy día es revertir el deterioro que hay en las expectativas. Por eso creemos que es importante tener una actitud positiva, pero también una actitud dialogante y lograr acuerdos lo que más sea posible. El protocolo tributario es un ejemplo a seguir».

«Es natural que haya discrepancias con respecto a las razones de la desaceleración… hoy lo más productivo es dedicar nuestro tiempo a pensar en cómo reactivar la economía».

«Cuidado también con los excesos de optimismo o pesimismo. Cuando las cosas van bien, creemos que no tenemos límite… Si, por el contrario, las cosas andan mal, nos baja un sentimiento de pesimismo tal que pareciera no tenemos solución».

«Entre los varios desafíos que destacan numerosos estudios están los de reducir el costo de la energía, el mejoramiento de la infraestructura y lograr una educación de calidad. El objetivo no solo es un mayor crecimiento, sino que también sea más inclusivo».

RODRIGO VERGARA
PRESIDENTE DEL BANCO CENTRAL

Baja del PIB potencial de 5% a entre 4% y 4,5%
El Banco Central bajó su estimación de crecimiento de mediano plazo para la economía, desde un nivel en torno a 5%, a un rango entre 4% y 4,5%.

La revisión surge a la luz de la evolución de la productividad total de factores (PTF) -que es aquella parte del crecimiento que no puede atribuirse al capital ni al trabajo- cuyo crecimiento ha mermado en los últimos años. La estimación supone que la PTF de tendencia de los sectores resto, que pesan 77% en el PIB nominal, crecerá en torno a 1% anual en los próximos años. Además, en los años que vienen el crecimiento del capital será de 4,5% frente al 5,8% que promedió en el último lustro, con lo cual la razón de inversión a PIB se mantendría en niveles similares al de la última década.

También considera que la disminución del crecimiento de mediano plazo es «un fenómeno esperable», pues se trata de la «natural convergencia de una economía que ha alcanzado niveles de ingresos per cápita más alto».

Factores externos y caída de expectativas por incertidumbre
Detrás del débil crecimiento de la economía chilena, Vergara identificó factores esperados asociados al fin del ciclo de altos precios de las materias primas y otros más sorpresivos, cuyo impacto es más difícil de determinar.

Entre estos últimos mencionó la caída en las expectativas económicas internas de los últimos meses, reflejadas en un aumento de la incertidumbre que ha afectado las decisiones de inversión y gasto de las empresas y de sus clientes.

«Un aumento de la incertidumbre genera naturalmente una postergación de proyectos (lo que en la literatura especializada se denomina la «opción de esperar»), que podría explicar en parte la caída de la inversión», precisó.

En este sentido, respecto de la reforma tributaria, dijo que «es natural pensar que hay un efecto, pero es muy difícil determinar cuánto».

También observó que detrás del menor dinamismo de la inversión minera no solo está la maduración del ciclo mundial de inversión en cobre. «Los retrasos, postergaciones y cancelaciones también han sido atribuidos por los partícipes de la industria a problemas internos relacionados con la falta de agua y los altos costos de la energía; a la excesiva demora en la definición sobre proyectos y la judicialización de algunos de ellos; así como a problemas con las comunidades y al aumento de los costos».

Otro de los factores esperados es que ha tendido a desaparecer el mayor impulso fiscal asociado a la reconstrucción post terremoto y maremoto de 2010. Y no menos importante, dijo Vergara, es que estos y otros factores hicieron que el ritmo de crecimiento de la economía superara su potencial durante los últimos años. «Ello hacía necesaria, y adecuada, una velocidad de expansión menor y más sostenible en el tiempo».

Supuesto considera dos o tres nuevos recortes de tasa de interés
Como supuesto de trabajo, que no necesariamente implica un compromiso, el Banco Central considera que la tasa de interés de política monetaria (TPM), actualmente en 3,5%, seguirá una trayectoria a la baja de acuerdo a las medidas de expectativas disponibles a fines de agosto.

Dichas expectativas apuntan a niveles en torno a 3% de aquí a fin de año e incluso algo menos, por lo que se trata de dos o tres recortes adicionales de 25 puntos base cada uno.

Economistas analizan los efectos del informe del Banco Central
Patricio Rojas
Consultor de Rojas & Asociados

«Alcanzar un crecimiento de 3% a 3,5% en 2015 va a depender del fisco con su plan de vivienda e inversión pública y echar a andar concesiones que sean rápidas, no grandes obras que toman más tiempo. En la primera mitad del próximo año el sector privado va aportar poco al crecimiento, pero si ve una posición clara del Gobierno respecto a las concesiones, eso puede ayudar a las expectativas. Creo que el Gobierno ha tenido un cambio en relación con unos meses atrás y debiésemos verlo más preocupado del crecimiento».

Ángel Cabrera
Consultor de Forecast

«La revisión de proyecciones valida la visión de que las tasas de interés van a seguir bajando -el mercado ya trabaja con tasas a 2,75% y 2,50%- y refuerza la presión alcista sobre el tipo de cambio, el cual va encaminado sobre los $600 a fines de 2014 y seguirá subiendo. Una caída en la tasa, todo lo demás constante, es positiva para el precio de las acciones, pero lo demás no está constante. El balance para el mercado accionario es negativo. Hay una alta probabilidad de que tenga una dosis relevante de sobrevalorización».

Dalibor Eterovic
Economista jefe del Grupo Security

«Los pilares que sustentan la proyección para 2015 son débiles. Vemos un impulso externo neutro y las tasas de interés internacionales podrían hacer más restrictivo el financiamiento. La política monetaria es expansiva y las tasas han caído, pero ha bajado el ritmo de expansión de créditos de consumo y corporativos. Se enfatiza el impacto del impulso fiscal que en parte es financiado con alza de impuestos, así que no es claro su efecto en la demanda. Y quedan fuentes de incertidumbre de más reformas».