Comparado con la medición 2013, nuestro país bajó en 10 variables de las 21 que componen el ranking elaborado por Americas Society y Council of the Americas. Sólo en cuatro indicadores logró un alza ligados a empleo y a vivir con más de US$4 diarios.

Por Cristián Torres.

Una importante caída tuvo Chile en el Índice de Inclusión Social 2014 realizado por Americas Society y Council of the Americas. En la tercera versión de este indicador nuestro país quedó en quinto lugar, tras ser líder regional en la primera medición en 2012 y segundo en el ranking de 2013.

Este índice clasifica a 17 países del continente usando 21 variables que evalúan desde el crecimiento del PIB a la capacidad de respuesta del gobierno, “buscando un enfoque multidimensional a la forma como tradicionalmente se mide el desarrollo” según la definición de los autores.

Este año nuestro país mostró una caída en 10 de las 21 variables que componen la medición, donde una de las mayores se observó en el “PIB invertido en programas sociales”. En 2012 y 2013 el porcentaje promedio de la década (móvil) gastado en este ítem era de 14,22% y descendió a 8,3% este año, lo que lo llevó a bajar desde el quinto lugar en 2012 al 12 en el presente ejercicio.

Otra importante caída se observó en la variable que mide los derechos de los homosexuales, ubicándose en el octavo lugar cuando el año pasado se ubicaba en el quinto. Asimismo, el informe indica que Chile se quedó atrás en la promoción de los derechos de las mujeres, al bajar dos peldaños hasta el séptimo sitio en la última medición.

Sin embargo, no todo es negativo. Nuestro país tuvo un mejor desempeño en variables como el porcentaje de la población que vive con más de $4 dólares al día y el acceso formal al trabajo. En la primera variable señalada subió un puesto tanto a nivel de género como de raza u origen étnico. Similar situación ocurrió en el acceso al trabajo formal.

Si bien no con alzas en el ranking, el país mantuvo un buen desempeño en parámetros como la promoción de los derechos políticos y la inclusión financiera de las mujeres. También en la inscripción en la escuela secundaria tanto en raza como en género, no obstante quedar bajo Bolivia, donde obtuvo avances en su puntaje.

El puntaje del país sólo disminuyó ligeramente en los derechos civiles y en el acceso a una vivienda adecuada.

Según el informe, junto con Nicaragua, Chile es el único país de la región en la que los derechos reproductivos de las mujeres están limitados a todos los niveles. “Permitir un mayor margen para el ejercicio de estos derechos, y crear deducciones fiscales para la atención de los niños, mejoraría drásticamente el puntaje del país. Del mismo modo, leyes que reconozcan los derechos de los ciudadanos homosexuales para entablar relaciones y casarse, harían que Chile fuera un país más inclusivo para todos sus ciudadanos”, sugiere el informe.

“Este es el tercer año que hemos recopilado esta información y la hemos ajustado a cada país, y hemos visto mejoras y retrocesos entre las variables. Lo que queda muy claro es que la inclusión social -a diferencia del crecimiento del PIB y el aumento del ingreso- es difícil de cambiar a corto plazo. Está profundamente arraigada en las condiciones históricas, estructurales, e incluso actitudinales”, aseguró Christopher Sabatini, director principal de políticas públicas de Americas Society/Council of the Americas.