Temporada invernal:
Los centros de esquí deben preocuparse de la seguridad, pero también los usuarios tienen que cumplir ciertas reglas para no lesionarse ni dañar a los demás.
Los niños ya salieron de vacaciones y muchos papás los acompañarán a distintos lugares, para hacer una pausa en medio del año. Como estamos en invierno, una opción es ir a los distintos centros de esquí que existen en el país.
Antes de subir a la montaña hay que tomar algunas precauciones si se va en vehículo propio. Como aconsejan en Liberty, en caso de nieve intensa, se debe descender del auto para limpiar los vidrios y reducir la velocidad si el rango de visibilidad es escaso. Previamente, mantener lleno el depósito de agua con anticongelante. Las luces tienen que estar libres de hielo y nieve. Al conducir de noche en condiciones adversas, es mejor detenerse y buscar refugio, para continuar solo cuando la situación mejore.
En la Mutual de Seguridad advierten que este deporte no está exento de riesgos. En especial, si se es un esquiador ocasional y no se realiza una preparación física previa. Además, las lesiones pueden aumentar, pues se practica en un ambiente extremo.
Por ello, recalcan la importancia de tener un entrenamiento adecuado y un correcto calentamiento muscular. A modo de prevención, sugieren preocuparse de mantener un buen estado físico durante todo el año, pues esto permite llegar más preparado a la montaña.
Asimismo, recomiendan esquiar en forma suave y evitando esfuerzos muy grandes que puedan producir fatiga, ya que el cansancio disminuye el tono muscular, e incrementa las posibilidades de sufrir una lesión.
En la comuna de Lo Barnechea, donde se ubican varios centros de esquí, cuentan con una normativa local para evitar accidentes de montaña. El decreto 2189 de abril de 2012 fijó diversas normas con el fin de otorgar la debida seguridad en el uso de remontes (andariveles), pistas de esquí, de snowboard y tubing . Se trata de normas de funcionamiento para las entidades operadoras de las instalaciones y para los usuarios.
A ellas se ciñen en Valle Nevado, donde cuentan con una zona de servicio para que los visitantes se estacionen según las indicaciones de los encargados de seguridad del centro invernal.
Dicen que lo más importante es seguir las instrucciones de los encargados y respetar a los otros esquiadores; hacer la fila en orden; subirse al andarivel con la cantidad de personas indicada para cada medio de elevación, tanto en el embarque como en trayecto y el desembarque; preocuparse de los niños (menores de 1 metro 25 cm de altura deben hacerlo con un adulto), y estar atentos al momento de tomar cualquier andarivel.
Hay que fijarse en que los esquís y sus fijaciones sean los adecuados y estén regulados para el nivel de cada persona. También, contar con ropa impermeable que proteja del frío como pantalones, parka y guantes.
Respeto al otro
La responsabilidad individual es un punto que destacan, ya que esta involucra a todos y comprende ciertas actitudes: mantener siempre el control de modo de ser capaz de detenerse o evitar personas u objetos; usar casco; darles preferencia a quienes van adelante y no parar obstruyendo una pista o cuando no lo ven desde arriba.
Al descender o antes de un cruce de pistas, mirar hacia arriba y ceder el paso; utilizar siempre dispositivos de freno para ayudar a prevenir la pérdida de equipos; leer todas las señalizaciones y advertencias, y esquiar solo en pistas habilitadas.
Si bien es obligación que los esquiadores solo ocupen las pistas señalizadas, algunos osados se desvían. Para prevenir accidentes, este centro de esquí ha reforzado las áreas «fuera de pista», con personal que alerta a esquiadores y practicantes de snowboard sobre los riesgos que corren, de las características del terreno y de los elementos de seguridad con los cuales tienen que contar, afirman.
Equipamiento necesario
Según advierten en la Mutual de Seguridad, es importante contar con un equipamiento adecuado para evitar lesiones y proteger el cuerpo ante eventuales accidentes. Usar un casco apropiado es relevante, ya que reduce en casi 43% la ocurrencia de traumas en la cabeza o la cara. Tampoco se deben olvidar las antiparras para proteger la vista de los rayos UV, fuertemente reflejados en la nieve, y el protector solar sobre FPS 30.
En caso de caídas
Lo más importante al sufrir un accidente es pedir ayuda de inmediato a los equipos de seguridad del centro invernal. En el caso de Valle Nevado, cuentan con una clínica en la cordillera y personal que resguarda las pistas. A los principiantes les recomiendan tomar clases para conocer y desarrollar una técnica segura. Luego, respetar su nivel y no acceder a pistas de mayor dificultad; estar concentrado y no distraerse al momento de entrar a ellas; controlar su velocidad y utilizar el equipamiento necesario, especialmente casco.