Siete de los diez productos que más subieron de precio durante el año pasado son alimentos
Este grupo, sumado a las bebidas no alcohólicas, sumó por sí solo un punto porcentual al incremento del costo de vida de los chilenos.

Por LINA CASTAÑEDA

La inflación anual en 2013 se empinó al 3%, en el centro del rango meta del Banco Central, luego que el IPC de diciembre registrara una variación mensual de 0,6%, su mayor incremento para ese mes desde 2011.

De los diez bienes y servicios que más subieron de precio el año pasado, siete son del rubro alimenticio. Entre ellos, las papas, el apio, los limones y el repollo. Los alimentos aportaron un punto porcentual a la inflación anual y si a ello se suman las alzas en servicios básicos -como agua, electricidad, gas y combustibles-, el aporte sería de 1,66 puntos porcentuales al índice general.

Alzas en las gasolinas, gas licuado y transporte urbano impulsaron principalmente el IPC en diciembre, mes que tradicionalmente ha sido de baja inflación por la estacionalidad de hortalizas y frutas.

La gasolina aportó 0,21 puntos porcentuales al IPC mensual; gas licuado, 0,152 puntos, y servicio de transporte en bus interurbano 0,146 puntos porcentuales, asociado este último al inicio de la temporada en el sector.

La encuesta de expectativas del Banco Central arrojaba una proyección para el IPC de diciembre de 0,2%, mientras que la última encuesta quincenal a operadores financieros tenía prevista un alza de 0,5% del IPC.

Con una inflación algo mayor a la proyectada, analistas del mercado reafirman su expectativa en el sentido de que el Banco Central mantendrá en un 4,5% la tasa de interés de política monetaria (TPM) en la reunión de enero. Pero también ratifican dos nuevos recortes de tasa en los próximos meses.

Un 48,6% de los bienes y servicios contemplados en la canasta que mide el IPC registraron alzas en sus precios en diciembre. El IPC subyacente, que excluye alimentos perecibles, y combustibles, subió 0,5% en relación al mes anterior, al igual que el índice que adicionalmente excluye las tarifas de servicios regulados.

Los precios de los bienes transables (que se comercializan internacionalmente) tuvieron un incremento mensual de 0,4% asociado al mayor precio del dólar, mientras que los bienes no transables (aquellos ligados a los servicios como salud, educación, transporte) tuvieron un alza de 0,9%.

Para el economista de la Universidad de Chile Alejandro Alarcón, esta última variación constituye una luz de alerta porque está reflejando una presión de precios proveniente de la demanda interna, pese a la desaceleración de la economía. «Apareció por primera vez y con mucha fuerza, la inflación de los no transables, lo que pone una nota de atención a la trayectoria que va a tener la inflación en el futuro», advierte Alarcón.

Los bienes no transables acumulan un aumento de 3,8% en el año, mientras que los transables se incrementaron un 2,4% en doce meses. A Matías Madrid, economista jefe del Banco Penta, esto le parece relevante, dado que la composición de la nueva canasta del IPC que comienza a regir en enero de 2014 tiene un mayor sesgo por servicios, los cuales en general tienen menor volatilidad en los precios, pero que el año pasado experimentaron mayores alzas. El economista proyecta una variación del IPC de 0,1% en enero y de 2,8% en 2014, asumiendo una menor presión de los servicios por la desaceleración de la demanda interna y un mayor impulso en los precios de la energía.

Para la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), la inflación de 0,6% no representa un brote inflacionario, sino una corrección normal de los niveles de precios relacionada con el aumento del tipo de cambio y que afecta fuertemente a través de combustibles, energía y transporte. Hace notar que el dólar observado ha subido 12% desde abril, lo que por ahora ha significado una corrección de la trayectoria inflacionaria de alrededor de un punto en relación con las expectativas de inflación de abril y mayo.

Además, señala un reporte del gremio, los traspasos del tipo de cambio han sido relativamente acotados porque bienes durables como computadores y televisores han tenido una caída en sus precios como consecuencia de los avances tecnológicos. La CCS mantiene su proyección de inflación de 3% para el presente año.

Banchile Inversiones proyecta una variación de 0,2% en el IPC de enero y BICE Inversiones, un alza de 0,3%.

4,9%

es el alza que acumularon los precios de los alimentos en 2013, lo que afecta principalmente al quintil de hogares más pobres que destinan el 37,4% de su presupuesto a ese rubro.

5,1%

es la variación anual que registró la división que incluye servicios básicos como agua, electricidad, gas y otros combustibles.