A fin de año aumentan los casos de trabajadores que atraviesan momentos críticos vinculados al estrés, pérdidas personales o conflictos laborales.

El estrés laboral sigue al alza en Chile. Según un informe de la Mutual de Seguridad, el 44% de los trabajadores declara sentirse agobiado o tenso en su empleo, cifra que sube al 57% en mujeres y llega al 32% en hombres. A esto se suma el estudio Better Work 2024 de Betterfly y Criteria, que sitúa al país como el que reporta mayor nivel de estrés en la región (46% frente al promedio latinoamericano de 38%).

En este contexto, especialistas advierten que las organizaciones deben prepararse para enfrentar episodios de crisis emocional dentro de los equipos. Los llamados “Primeros Auxilios Emocionales” se posicionan como una herramienta clave para actuar de manera inmediata, contener a la persona afectada y evitar que la situación escale.

Según explican, su aplicación no requiere formación profesional en psicología, sino conocer procedimientos básicos de contención.

A fin de año, señalan los expertos, aumentan los casos de trabajadores que atraviesan momentos críticos vinculados al estrés, pérdidas personales o conflictos laborales. Pamela Comparini, CEO de Motivar y Máster en Neurociencia Aplicada al Aprendizaje, subraya la importancia de que los equipos conozcan estas herramientas y sepan aplicarlas. Por su parte, el psicólogo Antonio Apablaza, académico del Centro de Atención Psicológica (CAPSI) de la UNAB, recalca la necesidad de poner atención a la salud mental dentro de las organizaciones.

Comparini advierte que el estrés puede afectar de manera significativa el desempeño de los equipos. “Reduciendo el pensamiento crítico, provocar un aumento de la reactividad ante situaciones complejas, lo que lleva a tomar decisiones impulsivas, y pérdida de la escucha activa, por lo que no se logra transmitir ni recibir los mensajes adecuadamente para tener una negociación objetiva y asertiva”.

Apablaza complementa señalando que, a diferencia de las lesiones físicas, la salud mental presenta límites más difusos dentro del trabajo. “Las consecuencias del estrés laboral se sienten igual, desafección, ansiedad, problemas de sueño, aumento en el consumo de sustancias y, en casos extremos y sin apoyo, algunas personas pueden llegar perder el sentido de la vida. De ahí la importancia de un trato humanitario”, afirma.

Ante este escenario, Comparini entregó una serie de técnicas orientadas a manejar situaciones de crisis:

Técnica de Respiración Oceánica: puede reducir el estrés y la ansiedad.

Meditación “La llama”: ayuda a calmar el cuerpo y disminuir la tensión.

Técnica del Reenfoque o Reestructuración de Recuerdos: permite cambiar la perspectiva sobre situaciones pasadas o presentes y gestionar emociones difíciles.

Técnica del Pensamiento Positivo: contribuye a mejorar la actitud, la comunicación afectiva y el ambiente laboral.

Apablaza sostiene que el rol de las empresas es clave para generar condiciones que permitan abordar el malestar emocional. “El trabajo tiene la potencialidad de ser un espacio donde damos algo al otro a partir de lo que somos y de lo que amamos. Cuidar el trabajo implica cuidar a quienes lo sostienen. Espacios de reconocimiento, flexibilidad y escucha, pueden transformar profundamente la experiencia emocional de fin de año en los equipos de trabajo”, indica.

Comparini agrega que estas instancias deben mantenerse durante todo el año, con especial foco en los meses de mayor presión, y destaca que “estas acciones, además, cuentan con el beneficio de poder ser financiadas a través de la Franquicia Sence, donde los colaboradores y las empresas pueden obtener estos conocimientos sin costo alguno”.

Finalmente, la experta enfatiza que “las organizaciones cuenten con colaboradores capacitados en primeros auxilios emocionales, ya que esto no sólo promueve un ambiente de mayor empatía y apoyo, sino que también ayuda a prevenir conflictos y mejorar la cohesión del equipo”.

Fuente: Emol.com 

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