• La sexta versión del estudio elaborado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) y el Centro UC de Encuestas y Estudios Longitudinales de la Universidad Católica mostró cómo ha evolucionado la percepción de cambio desde noviembre de 2020. Uno de sus hallazgos es que, a más de un año del levantamiento de restricciones producidas por el Covid-19, un porcentaje importante de personas sigue viendo que su día a día no es el mismo de antes.

“¿Cuán diferente fue su vida la semana pasada en comparación con su vida antes del Covid-19?”. Es la quinta ocasión que se ha planteado esa interrogante, y el resultado sigue siendo contundente: la mitad sigue sintiendo que su vida es “bastante” o “completamente diferente” a marzo de 2020, cuando en Chile comenzaron a regir las primeras restricciones provocadas por la pandemia.

De acuerdo con el estudio elaborado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) y el Centro UC de Encuestas y Estudios Longitudinales de la Universidad Católica, el punto más alto en la percepción del cambio de vida en la personas fue en abril de 2021, cuando un 73,2% de los encuestados dijeron que su quehacer diario era considerablemente distinto.

Daniela Campos, jefa de Riesgo Psicosocial de la  ACHS, sostiene que “en abril de 2021 más de 16 millones de personas estaban confinadas a cuarentenas producto de la pandemia, por lo que ese alto porcentaje es fácil de entender. Sin embargo, para esta última medición, de noviembre de 2022, no había restricciones de ningún tipo, por lo que podemos inferir que hay un porcentaje importante de personas que siente que los cambios vividos en este periodo no serán fáciles de superar y quizás puedan ser permanentes”.

Según la académica de la UC Antonia Errázuriz, estos datos muestran la magnitud con la que las personas perciben el cambio en su estilo de vida en el contexto de la post-pandemia. “Es probable que la amplia percepción de cambio en la población (1 de cada 2 personas) tenga que ver tanto con la adopción de innovaciones desarrolladas durante la pandemia como con que todavía estamos conviviendo con algunos elementos surgidos como respuesta a esta”, dice.

Al momento de analizar la sensación de cambio por rango etario, la última encuesta reveló que los menores de 45 años lo perciben de forma muy superior a las personas de mayor edad. La mayor diferencia se dio entre el tramo de 35 a 44 años (percepción de cambio de un 64,2%) y 75 a más años (27,6%). Asimismo, quienes cuentan con educación superior sienten mayor cambio en su vida pre-covid respecto de aquellos con menor nivel educacional (cerca de 15 puntos porcentuales adicionales).

Factores de cambio

Quienes manifestaron problemas de salud mental también han visto más afectada su vida, al punto que perciben que los cambios que impuso la pandemia se mantienen y sus vidas distan de lo que fue el periodo previo a la pandemia.

Por ejemplo,  aquellos que padecen depresión, ansiedad, insomnio y peor ánimo tienen un 20% de mayor probabilidad de reportar que la vida actual es bastante o completamente diferente a la situación pre pandemia. Asimismo, las personas que presentan problemas de soledad mostraron la mayor diferencia, con 17% más de probabilidad de reportar grandes diferencias en su vida. Los problemas de consumo de alcohol, por su parte, están relacionados con un 8% adicional de probabilidad de reportar una percepción de cambio importante.

Los datos proporcionados por el estudio permiten encontrar en los factores económicos una razón para la sensación de cambio que aún persiste. David Bravo, director del Centro UC de Encuestas y Estudios Longitudinales indica que “la percepción de cambio en la vida cotidiana es mayor en aquellos que han experimentado caídas en el ingreso del hogar, en quienes no tienen empleo y en los casos en que el hogar presenta una situación de deuda complicada”. En efecto, acota, “si se considera que aún no se recuperan los empleos perdidos en la pandemia y se está lidiando con la inflación como un fenómeno nuevo vinculado con la pandemia, puede ser explicable que las personas todavía consideren, en gran medida, su vida trastocada”.

En relación con lo anterior, las personas con situación de deuda complicada y quienes están en hogares que han experimentado caídas de ingresos durante la pandemia son quienes en mayor proporción consideran que su vida actual es bastante o completamente diferente a su vida previa (57,6% vs 41,4%).

En cuanto a la situación laboral, el 52,8% de quienes tienen trabajo sintieron una modificación significativa en su día a día, en comparación al 47,6% de quienes no tienen trabajo y 39,6% de quienes son considerados inactivos (que no participan en el mercado laboral).

Datos sobre el estudio

El “Termómetro de la Salud Mental en Chile ACHS-UC” es un estudio longitudinal, con una muestra aleatoria de aproximadamente 3.000 individuos desde 2022, representativa de la población nacional urbana mayor de 18 años, seleccionada a partir de una muestra representativa de hogares. Se llevó adelante a través de entrevistas telefónicas sobre una muestra de viviendas previamente entrevistadas en persona.

Sus principales indicadores en el ámbito de la salud mental están construidos a partir de metodologías internacionalmente validadas (sintomatología GHQ-12; depresión PHQ-9; exposición a riesgos CoPsoQ; engagement UWES-3; consumo de alcohol AUDIT-C; insomnio ISI; soledad-escala UCLA-; y actividad física-escala UCL).

Fuente: ACHS