• El presidente de la asociación gremial destaca la importancia del seguro social de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y se refiere a los desafíos que tiene el sistema.

Casi 7 millones de trabajadores están protegidos por el seguro social de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales (Ley 16.744), que es administrado por tres instituciones privadas (Mutual de Seguridad, ACHS e IST) y una pública (ISL).

Su capacidad curativa y rehabilitadora es reconocida y cuenta con fondos de reservas para el pago de pensiones y de atenciones médicas de por vida. Pero su principal rol es asesorar a los empleadores en cuidar la vida de sus trabajadores mediante la prevención.

A nivel mundial hay diferentes modelos de seguridad social, ¿comparte la necesidad del trabajo conjunto entre la administración estatal y la participación del sector privado?

El sector privado ha jugado un rol fundamental en el sistema de seguridad social en Chile. En el caso de las mutualidades -cuyos principios son la universalidad y solidaridad- hace más de 60 años actuamos como organismos administradores  privados de la Ley 16.744, logrando disminuir la tasa de accidentabilidad de un 30% a 2,5% y otorgando al trabajador que haya sufrido un accidente o enfermedad laboral atención integral de salud hasta la rehabilitación médica.

Si bien hay aspectos que se pueden mejorar, creo que el trabajo mancomunado entre el sector público y privado es fundamental, ya que el resultado va en beneficio de la población.

Actualmente se está discutiendo el Plan Universal de Salud, ¿está de acuerdo en la incorporación del sistema de salud laboral a este plan?

Me parece riesgoso que al integrar los sistemas de salud común y laboral se pierda la complementariedad que hoy tienen. Una unificación de ambos debilitaría fuertemente la salud y seguridad laboral, que hoy es reconocida como un derecho social de los trabajadores, con un alto estándar de servicio y que no establece diferencia por renta ni por tamaño de empresa.

¿Cuáles son los desafíos de las mutualidades?

El primer desafío es la adecuación a una nueva realidad, entre ellos, las nuevas formas de trabajo, donde resulta clave ampliar la cobertura del seguro a los nuevos tipos de trabajadores independientes, y el creciente número de trabajadores informales, porque para los trabajadores el empleo formal garantiza la protección en caso de accidentes.

Fuente: La Tercera