‘Se acabó el tiempo de las explicaciones y ahora tienen que venir las soluciones’, dijo la ministra de Salud, Carmen Castillo, tras reunirse con los directores de los cuatro servicios de salud que concentran las listas de espera Auge y no Auge. El encuentro se produjo luego que en abril las garantías retrasadas -patologías Auge/Ges que no se resolvieron en el plazo legal- llegaran a 14.385, acercándose al peak histórico de noviembre de 2015, cuando se alcanzaron 14.644. Además, las cifras mostraron que los pacientes en lista de espera Auge hoy aguardan 106 días, en promedio, por la prestación postergada, un 61% más que en 2014, cuando el retraso en el cumplimiento ponderaba 65 días.

La instrucción, inédita, fue clara para los directivos: o resuelven los retrasos de atención o la administración de los recintos, a través de la gestión de sus recursos, será intervenida por el ministerio y Fonasa. ‘Ya no es posible seguir con los retrasos. Tienen que ordenarse fijando la antigüedad de la lista y viendo cómo la resuelven. Se les dará un par de meses para ver si tienen capacidad de resolver y, si no, se les va a quitar fondos del Pago por Prestaciones Valoradas (PPV) para centralizar a lista de espera a través de Fonasa’, agregó Castillo. De los recursos que recibe un servicio de salud para distribuirlos a los hospitales, más del 50% corresponden a PPV, que financia las diversas atenciones de salud, ambulatorias y hospitalarias.

En caso que los recintos no disminuyan las esperas, el Minsal tomará parte de esos recursos y los destinará a licitaciones, que gestionará Fonasa directamente, para buscar las soluciones requeridas en otro servicio de salud o en el sector privado. Servicios con retrasos Según el informe mensual sobre el cumplimiento de los servicios de salud, es el Metropolitano Norte (Ssmn) el que lidera las listas de espera, seguido por el Sur Oriente (Ssmso), Valparaíso-San Antonio y Central (Ssmc) (ver infografía). Los recintos metropolitanos, además, están entre los que tienen la mayor lista de espera para una consulta de especialidad, la que en abril llegó a 1.606.881 personas. Alfonso Jorquera, director del Ssmn, explicó que el 94% de su lista está concentrada en el Hospital San José.

‘Nos hemos juntado con el equipo directivo y clínico para tomar medidas que nos lleven a la normalización. Agregó que en la lista hay, al menos, 800 pacientes inubicables, por lo que se están ‘haciendo campañas comunicacionales para que los pacientes actualicen los datos, mandando cartas y haciendo visitas domiciliarias’. Eduardo Bartolomé, director (s) del Ssmc, dijo que, en su caso, influye que gran parte de la lista son pacientes oftalmológicos del Hospital El Carmen de Maipú, cuya atención está agendada en el Centro de Referencia que se está adaptando en la comuna.

Al igual que en el Ssmn, el Central tiene unos 150 pacientes inubicables. ‘Estamos totalmente abocados a la resolución, tras las instrucciones recibidas’, dijo Bartolomé, quien agregó que ‘esto es como si tu papá te rebajara la mesada porque no lavaste los platos y se la dio a tu hermano que sí lavo. No lo veo como algo malo, porque lo que está en juego son derechos de las personas, eso es lo que aporta el Ges’. Dagoberto Duarte, director del Servicio de Valparaíso San Antonio, sostuvo que su lista se justifica por falta de especialistas y aumento en la demanda.

‘En 2015 hacíamos cuatro mil prestaciones por vicios de refracción y hoy estamos llegando a las cinco mil’. Agregó que ‘se nos pidió que resolviéramos la mayor cantidad de aquí a dos meses, lo que es posible si actuamos en conjunto y de forma coordinada’. En el Servicio Sur Oriente no hicieron comentarios. Reacciones Para el economista en salud de la U. Andrés Bello, Rony Lenz, la medida tiene sentido siempre y cuando ‘los hospitales tengan capacidad ociosa, estén mal gestionados o se les está entregando más financiamiento del necesario’.

Añadió que si, en cambio, el problema ocurre dentro de una buena gestión y lo que hay es un exceso de demanda, la responsabilidad de la lista de espera ‘no es del hospital sino de Fonasa y del Minsal’. Oscar Arteaga, director de la Escuela de Salud Pública U. de Chile, dijo que ‘me parece correcto que el Estado, con los mecanismos que estime convenientes, se asegure que esas garantías se cumplan. Fonasa es el seguro público y debe garantizar que se cumpla el Ges y, por lo tanto, que se haga cargo buscando prestadores, no es sino cumplir con su rol.

 

Fuente: La Tercera