Las Isapres acusan que el hecho de que las Mutualidades de Seguridad no sean partícipes del sistema de licencias médicas electrónicas (LME) ha implicado que los médicos no puedan marcar, de forma electrónica, una enfermedad como «laboral». Y eso, tiene como efecto que ellos deben asumir los costos de las patologías que son «de origen laboral».

Según sostienen, “los costos son millonarios”. Desde las aseguradoras privadas calculan entre $ 18 mil millones a $ 25 mil millones lo que al año tienen que desembolsar por licencias médicas supuestamente laborales.

Teniendo en cuenta lo anterior, desde la Asociación de Isapres indican que las Mutualidades de Seguridad, al «resistirse» a entrar a este sistema, pueden provocar el fracaso del mismo. Sin embargo, este sistema ya lleva casi 10 años desde su implementación.

«Es importante tener buenos mecanismos de control para evitar que, en definitiva, el sistema se deje de utilizar», comentó el presidente del gremio, Rafael Caviedes.

Mutuales: no depende de ellos

Pero las Mutuales no se quedan calladas y acusan a las Isapres de «un profundo desconocimiento» de cómo opera el sistema.

Según el presidente de la Asociación de Mutuales, Ernesto Evans, lo que dicen las aseguradoras «es que las mutualidades se resisten a sumarse a las LME, pero eso no es verdad, para nada nos resistimos, pero la responsabilidad del sistema no es de las mutuales».

En este sentido, explica que cuando se creó el sistema, en 2007, en su origen fue pensado para las licencias que se llaman «tipo 1» (o la de patologías comunes) y en el caso de la licencias tipo 5 y 6 (las laborales) aún no existe la opción en el sistema, «y ahí, eso no es responsabilidad de las mutualidades, ya que nunca nos hemos opuesto».

Pero eso no es todo.

Para demostrar el interés en que sean incluidos, Evans indica que desde hace unos meses participan en una mesa técnica los integrantes del gremio junto a la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso), con el fin de ver «la forma de poder incorporarnos al sistema».

«Tiene que articular el Gobierno con las Isapres, con el sistema de mutualidades, con Fonasa, entre otros, para que exista un ambiente tecnológico que permita esto», añadió el presidente del gremio de las Mutuales de Seguridad.

Y como asociación van más allá, aprovechando de hacer un reclamo, ya que aseguran que ellos también tienen que responder por atenciones primarias que muchas veces no les corresponde, denunciando con ello que los hospitales públicos tienen una deuda acumulada con este sector que supera los $ 30 mil millones.

 

Fuente: El Diario Financiero