El organismo señaló que la incertidumbre más importante en el mediano plazo para Chile es la desaceleración de la economía china.
Por EFE/Bloomberg.
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Angel Gurría, dio a conocer este miércoles el Estudio Económico de Chile 2015 (Economic Survey), en el que el organismo mantuvo su estimación para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) este año en 2,2%.
En tanto para el próximo año se prevé una expansión para la economía chilena de 2,6%, mientras que en 2017 el crecimiento se aceleraría a un 3,3%.
En su informe el organismo señaló que la incertidumbre más importante en el mediano plazo para Chile es la desaceleración de la economía china, el mayor consumidor mundial de metales. En este sentido señaló que una reducción del 2% en el ritmo de crecimiento de la demanda interna en China se traduciría en un impacto negativo de medio punto porcentual en el PIB de Chile.
Gurría señaló que Chile «sigue siendo una sociedad altamente desigual en cuestión de ingreso, riqueza y educación».
En ese contexto, destacó que las reformas que impulsa el gobierno en materia tributaria, educativa, laboral y constitucional, permitirán «un gran beneficio para el país si se implementan de forma correcta».
El informe sobre Chile precisa que «se está reformando el sistema educativo para generar mayores oportunidades para la población económicamente más desfavorecida».
En el terreno económico, Gurría resaltó la gestión económica de Chile y consideró que el país está en mejor pie que sus vecinos para enfrentar las adversidades externas.
«Felicitamos a Chile por su manejo macroeconómico. Su prudencia le permite afrontar el temporal mucho mejor que Latinoamérica», sostuvo el economista.
No obstante, llamó a Chile a disminuir su dependencia del cobre a través del desarrollo del conocimiento e innovación.
Para mantener su fortaleza, dijo, Chile deberá «expandir su economía más allá de la extracción de recursos naturales e incrementar su aporte basado en el conocimiento a las cadenas globales de valor, incluida la adopción de reformas estructurales que favorezcan la productividad».
Pese a que Chile ha mejorado los niveles de vida y reducido la pobreza en la población, aún queda mucho por hacer para asegurar que el país esté en condiciones de adentrarse «en una senda de crecimiento más sólido, inclusivo y sostenible», añadió.
Gurría también comentó los casos de los carteles entre grandes empresas que manipulaban los precios de los medicamentos, los pollos y los productos de papel tissue descubiertos en Chile, con la implicación de grandes empresas.
Recalcó que casos como estos «afectan principalmente a la productividad», que a su juicio es «el principal reto que enfrenta la economía chilena. La productividad en Chile ha sido plana y en algunos períodos incluso ha sido negativa», subrayó.
Ha sido negativa, pues pese a que el marco regulador y las políticas han mejorado, «el nivel de competencia en varios sectores sigue siendo débil».
Consideró que el cartel del papel tissue «es un ejemplo extraordinario» y un «ejemplo muy dramático de cómo alguien pudo hacer un cartel con el precio del papel del baño. Imagínense entonces cuantos carteles más aun no descubrimos y cuántos precios de más le clavaron a la sociedad chilena», enfatizó.