Gremio solicitó al comité de ética interno recabar información y sugerir las medidas que correspondan.

Por Valentina Fuentes J.

Una clara exigencia impuso la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) a las empresas denunciadas en el marco de la colusión del papel: «Reparar el daño causado por las acciones de sus ejecutivos».

La asociación gremial hizo el llamado a través de un comunicado que envió a pocas horas de que el propio presidente de la entidad, Hermann von Mühlenbrock, manifestara su rechazo categórico al ilícito, y en el cual se informó de la solicitud al Comité de Relaciones Internas y Ética del gremio -que se reunirá el lunes-, para que a la brevedad recabe toda la información pertinente y «recomiende al consejo general las medidas que correspondan».

«Esto es muy doloroso, nos genera una frustración muy grande» habían sido las primeras palabras de Von Mühlenbrock, en el marco de un seminario organizado por KPMG, Chile Transparente y la Universidad del Desarrollo, cuyo foco era la transparencia corporativa. Instancia que sirvió de plataforma a los representantes empresariales para manifestar -y desde temprano ayer- públicamente su rechazo al cartel.
«Nos genera amargura y un profundo rechazo», calificó, por su parte, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alberto Salas, quien también fue invitado como panelista al seminario.

Transparencia corporativa

«Quiero repudiar de la forma más enérgica de lo que nos hemos enterado. Nos hacen tremendamente mal. Vamos a seguir trabajando para que estos hechos no se vuelvan a repetir porque afectan fuertemente a la fe pública, a las personas», sentenció el presidente de la Sofofa. Y advirtió: «hay que ver cómo vamos a reparar el gran daño hecho a millones de chilenos, porque aquí evidentemente que se ha generado una sobreutilidad que imagino que, de alguna manera, tendrá que compensarse el daño a los consumidores durante tantos años».

De todos modos, el empresario felicitó que la compañía ligada al grupo Matte hiciera una auto denuncia y despidiera a ejecutivos: «Es una actitud transparente y clara del directorio». Además puntualizó que hasta el momento los únicos culpables serían los gerentes y no los dueños de la empresa. En ese sentido, aseguró que ya citó al comité de Ética del gremio empresarial para que se pronuncie respecto de si efectivamente la culpabilidad está solamente en los ejecutivos, considerando que CMPC es una de las compañías socias de Sofofa.

Y abierto el debate respecto del castigo que estos ilícitos debiesen tener, Von Mühlenbrock se manifestó a favor de la pena de cárcel y afirmó que aunque la Ley no lo establece así, «evidentemente creo que habría que aplicar sanciones mucho más duras» que las pecuniarias.

Salas, en tanto, fue enfático en señalar que el hecho choca bruscamente con el «restablecimiento de las confianzas en que los gremios hemos estado trabajando arduamente». Por el contrario, aseguró que el ilícito «genera desconfianza y no ayuda a nuestro clima de negocio para mejorar el crecimiento y la inversión».

Recordó que «le hemos pedido a cada una de las ramas que actualice sus códigos de buenas prácticas». En esa línea, dijo que estos hechos podrían, incluso, terminar en la exclusión de la asociación del gremio que cometió el delito.

Respecto de las consecuencias judiciales del caso, manifestó que «la colusión es un hecho gravísimo que debe ser condenado con la mayor fuerza». Asimismo, aseguró que «si bien la auto denuncia y delación compensada pueden mitigar el hecho, en términos morales el hecho es absolutamente condenable».