Tras presenciar la firma del acuerdo de dialogo social entre los trabajadores y directivos de ENAP en Magallanes, la Mandataria aseguro que ese es el tipo de trato que el Gobierno busca establecer con la reforma laboral.

Por Felipe Vargas, enviado especial a Magallanes.

PRIMAVERA.- Luego del retraso que sufrió su vuelo a la Región de Magallanes, la Presidenta Michelle Bachelet llego al sector de El Arenal de la comuna de Primavera para presenciar la firma del acuerdo de dialogo social entre los trabajadores y directivos de ENAP.

Dicho protocolo establece una serie de mesas de trabajo entre ambas partes para resolver sus diferencias de manera permanente y contribuir así al Plan de Desarrollo Estratégico de la empresa, que incluye el mejoramiento de las condiciones laborales de sus trabajadores.

En ese contexto, la Mandataria destacó que «soy una convencida que los trabajadores de una empresa tienen mucho que aportar en el diseño e implementación de los planes estratégicos. Todos ganamos cuando una empresa y sus directivos y sus trabajadores pueden lograr, a veces discutiendo, naturalmente, grandes acuerdos».

«El Estado tiene muy buenos ejemplos, el Banco Estado es una de aquellas instituciones que efectivamente tiene una excelente relación y trabajo conjunto entre sus directivos y sus trabajadores y me parece que Enap va a demostrar exactamente lo mismo», añadió.

En esa linea, la jefa de Estado subrayó que el acuerdo de ENAP «va a permitir también tener ejemplos en lo que es la discusión que estamos llevando a cabo en la agenda laboral en el parlamento, porque queremos que los empleadores y los trabajadores puedan trabajar juntos convencidos de que eso beneficia a ambos».

«Por eso es tan importante que compartamos una visión y que seamos capaces de crear condiciones para que impere la confianza, con relaciones entre trabajadores y directivos basadas en el diálogo, la participación y el respeto, estamos robusteciendo nuestras empresas», enfatizó.

Asimismo, Bachelet subrayó que «así concebimos en el Gobierno el mundo del trabajo que Chile necesita y que podrá llevarnos al desarrollo, porque no solo importa producir más y mejor, también importa la forma en que producimos. El respeto y reconocimiento que se le da a cada actor en ese proceso».

«Esperamos que su ejemplo sindical y directivo inspire a muchas otras empresas y sectores, para que en Chile todos podamos poder decir que estamos poniendo lo mejor de cada parte para hacer de nuestro país más cohesionado y donde el trabajo sea no solo una fuente de ingreso, sino que también un espacio de realización personal», concluyó.