Sebastián Claro afirmó que pese a que las tasas de crecimiento han sido más altas, «no estamos pensando en una recuperación rápida».

Por Agencia Bloomberg.

La recuperación de Chile del crecimiento más débil en cinco años va a ser lenta en tanto las inversiones tienen dificultades para repuntar, dijo el consejero del Banco Central Sebastián Claro.

Un tipo de cambio más débil y una mayor infrautilización del mercado laboral están empezando a aumentar los márgenes de ganancia, allanando el camino para un crecimiento limitado de la inversión, explicó Claro en una entrevista.

“Vemos tasas de crecimiento más altas que las que hemos visto hasta ahora, aunque no prevemos un crecimiento significativo”, dijo Claro. “No estamos pensando en una recuperación rápida”.

Un auge de la minería de una década ocultó las deficiencias en materia de políticas que llevaron a quince años de caída de la inversión en otras industrias, agregó Claro. Hasta que no se resuelvan esos problemas, la recuperación de la inversión va a ser limitada, restringiendo la tasa potencial de crecimiento y el margen para rebajas de las tasas de interés.

En vista de que el crecimiento todavía es poco vital y la inflación se ubica en el extremo superior de la meta, la tasa de referencia del banco central está “en un nivel adecuado” de 3%, dijo Claro. “En los próximos trimestres, las tasas deberían quedarse donde están”.

Los funcionarios tienen una “gran convicción” de que la inflación estará por debajo del 4% a fin de año y se desacelerará hacia el 3% a comienzos del año que viene, añadió.

El peso, que se depreció un 12,5% frente al dólar en los últimos 12 meses e hizo aumentar la inflación, no debería bajar mucho más, dijo.

Desafíos y virtudes

“La economía de Chile tiene enormes desafíos y enormes virtudes”, señaló el consejero, quien ingresó a la junta de política monetaria en diciembre de 2007 y supervisó las tasas durante la recesión de 2009 y el posterior auge del cobre.

Los dos años de desaceleración han sido “saludables”, luego del rápido crecimiento de los años anteriores, opinó Claro.

Sin embargo, nueve meses después que el Gobierno empezó a hablar de un punto de inflexión y cuatro meses después de celebrar los brotes verdes de recuperación, la actividad económica creció sólo un 1,7% interanual en abril, menos que lo pronosticado por los 23 economistas -de 24- encuestados por Bloomberg.

En mayo, las exportaciones cayeron 22% interanual, mientras que las importaciones se redujeron 19,3%, lo que indica que el crecimiento débil va a continuar.

“Hay cierta idea de que la oferta está empezando a tener un mayor dinamismo, pero eso todavía es una pregunta abierta”, dijo Claro. “Si la capacidad de inversión de la economía sigue baja, la capacidad de crecimiento también es baja”, señaló y añadió: “Los niveles de inflación y la situación del mercado laboral muestran que hay restricciones a la oferta que llevan a un debate sobre el crecimiento potencial”.