Indicaciones a la reforma laboral:

Para el actual diputado Osvaldo Andrade, los cambios introducidos recientemente por el Gobierno perfeccionan la iniciativa legal, mientras que para el abogado Juan Carlos Jobet, el foco sigue siendo dar más poder a los sindicatos.

Lina Castañeda «Gobierno hace guiños a la CUT y no recoge otras propuestas»Juan Carlos Jobet, ex ministro del Trabajo:
Las indicaciones del Gobierno a la reforma laboral, en opinión del abogado y ex ministro del Trabajo del Gobierno de Piñera, Juan Carlos Jobet, no modifican el fondo. «Está enfocado a dar más poder a los sindicatos, limita la libertad de afiliación de los trabajadores y desaprovecha la oportunidad de generar más espacios de diálogo para que trabajadores y empresarios busquen acuerdos de adaptabilidad».

-¿Recogen las propuestas presentadas en la tramitación legislativa?

«Da la impresión de que son indicaciones que el Gobierno hace para darle en el gusto a la CUT. No se recogen los comentarios de ninguno de los otros sectores que hicieron ver sus críticas constructivas».

-¿Qué le merece reparos?

«La indicación que introdujo el Gobierno que restringe la definición de servicios mínimos y señala que el daño grave es respecto de las instalaciones o infraestructura y saca la expresión ‘bienes materiales’. Es una indicación negativa porque, por ejemplo, en una empresa ganadera los galpones son infraestructura o instalaciones, pero los vacunos son bienes materiales, y tal como está la indicación no habría que preocuparse de su subsistencia».

-¿Cuál fue la omisión más importante?

«Hay una asimetría incomprensible en relación con la titularidad sindical. El proyecto establece que se aplica sin perjuicio del porcentaje de sindicalización que tenga la empresa de modo que si es 10%, el 90% restante tiene que atenerse a lo que negocie el 10%».

«En los pactos de adaptabilidad se establece que para poder negociar materias adicionales tiene que haber una sindicalización de 30% en régimen y de 65% en los períodos de transición. En un caso no hay quórum y en el otro es muy alto. Lo otro que es bien grave es que se deja fuera de la adaptabilidad a las pymes, que tienen mucho menos sindicalización. Mi temor es que los pactos de adaptabilidad van a terminar siendo letra muerta».

-¿Considera oportuno acortar la entrada en vigencia?

«Aunque puedo ser minoría en mi sector, creo que si un proyecto es bueno, mejor que entre en vigencia antes que después. El problema del proyecto no es cuándo entre en vigencia, sino su contenido. Seis meses me parece un período razonable para que las empresas se adapten a la nueva normativa».

Los empresarios dijeron cosas distintas en las audienciasDiputado Osvaldo Andrade, ex ministro del Trabajo:
Las indicaciones al proyecto de reforma laboral mejoran la iniciativa legal, sostiene el diputado PS y ex ministro del Trabajo del primer gobierno de Bachelet, Osvaldo Andrade.

«Durante el período de audiencias de la Comisión de Trabajo, vimos que había que perfeccionar un área bien importante en materia de procedimientos y de información, haciéndolos más simples y flexibles y no promover el exceso de judicialización, entregándole a la Dirección del Trabajo facultades acotadas y no tan amplias como las contempladas originalmente».

-¿Recogen propuestas de las audiencias?

«Varias; por ejemplo, que los servicios mínimos sean materia de un diálogo entre el sindicato y la empresa fuera de la negociación colectiva. En el caso de la CUT, con el tema de criminalización y de los empresarios, que los pactos de adaptabilidad se puedan tratar fuera del proceso de negociación».

-Pero se restringen los servicios mínimos…

«El factor ordenador del tema de los servicios mínimos es que haya huelga, que es el instrumento que tiene el mundo del trabajo para presionar. Si alguien piensa que la huelga se hace para que todo siga funcionando igual, estamos hablando en chino. Aquí se ha seguido el estándar de la OIT».

-¿Qué piensa de la crítica conjunta que hicieron los gremios?

«Hay gente que critica el proyecto sin conocerlo. Entiendo que se juntó un grupo de gremios para criticar y decir que el proyecto es malo. Me causa extrañeza saber que el compañero Garretón fue uno de los expositores principales; mire cómo nos cambia la vida. Me encantaría que los empresarios, en vez de estar haciendo estas cumbres, por qué no vienen para acá, se sientan y dicen esto es lo que nosotros queremos. Lo que dijeron en las audiencias y lo que dicen ahora: son dos mundos, son cosas completamente distintas».

-¿Fue adecuado acortar a seis meses el plazo de vigencia?

«Creo que un año es mucho, hay que considerar que en este tiempo las cosas se están discutiendo y acordando. Además, se ha acotado mucho la intervención de la DT. El gobierno de la Presidenta Bachelet tiene como matriz la lucha contra la desigualdad y el abuso y ambos se expresan con nitidez en el mundo laboral. Los que no quieren reforma quieren que esa situación continúe».