El nuevo director de la OIT para el Cono Sur de América Latina, Fabio Bertranou, se reunió con la ministra del Trabajo y expuso ante el Congreso.

Por Pía Toro.

Recién asumido como director de la OIT para el cono Sur de América Latina, Fabio Bertranou tuvo audiencia con la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, donde el tema principal fue la reforma laboral.

Tras una hora de reunión el funcionario internacional valoró el trabajo de reformar parte del Código Laboral.

“Que se esté tocando esta temática muestra la madurez política e institucional de Chile; es importante que constantemente se esté renovando el diálogo y se esté discutiendo las relaciones laborales. Esta propuesta del Gobierno apunta a fortalecer una institución muy importante que es la negociación colectiva”, dijo.

Consultado por el debate en torno a la negociación colectiva ramal, que solicitó la CUT (Central Unitaria de Trabajadores) y fue adoptado por parlamentarios oficialistas como bandera de lucha, Bertranou evitó referirse al caso específico de Chile o entregar recomendaciones. Aunque de todas maneras señaló que “en los países que hay negociación por rama también se da la posibilidad que las empresas puedan negociar a nivel descentralizado, a partir de empresas particulares. Hay una diversidad de experiencias a nivel mundial y hay resultados de todo tipo. Lo importante es que esa negociación por rama pueda incluir las particularidades de cada empresa”.

En este sentido y respecto a los efectos económicos que podría tener la reforma, sostuvo que es difícil cuantificar el impacto, “porque el desempeño económico y de las empresas está explicado por varias variables. Lo importante es que haya disposición bipartita para que exista negociación”, aclaró.

En cuanto al principio de mejorar la distribución de ingresos a través de mayor negociación colectiva, la nueva autoridad de la OIT explicó que los países con mayor fortaleza de las instituciones laborales, como la negociación colectiva, se ha observado menor dispersión salarial, o sea que el Producto de lo que genera la economía en ese sector se distribuye de manera equitativa entre capital y trabajo y entre los trabajadores”.

Frente a las críticas de continuidad con el plan laboral de José Piñera, dijo que la propuesta del Ejecutivo modifica algunos aspectos: “no es una modificación integral del Código del Trabajo de la época de la dictadura”. Y agregó que “esta reforma tiene correspondencia con los tratados que ha firmado Chile”.