• La ACHS, junto a Fundación Integra, lanzó esta iniciativa buscando crear una cultura preventiva en toda la comunidad educativa.
• Según cifras de la ACHS, el año pasado se registraron más de 11 mil incidentes que afectaron a profesores y trabajadores de los establecimientos educacionales.

El regreso a clases es complejo e intenso por diversas razones y sin duda entre ellas está el que volvemos de un reparador descanso a reintegrarnos a la rutina y estamos más propensos a sufrir accidentes. El inicio de clases supone un desafío para padres, educadoras y todas las personas que trabajan en el sector.
Para facilitar este ingreso, es de suma importancia considerar la seguridad de los niños y las auxiliares de párvulos y es por esta razón que la ACHS, junto a Fundación Integra, dieron a conocer la campaña preventiva “Regreso a Clases Seguro”, que pretende evitar los accidentes y crear una cultura preventiva, que una a los equipos educacionales, familias y apoderados en torno a la seguridad. Esta actividad se realizó en el jardín infantil Infanta Leonor de España de la comuna de San Joaquín, el que recibe diariamente a más de 100 niños.
La actividad contó con la presencia de la directora regional de Integra, Julia Escobedo; del alcalde de San Joaquín, Sergio Echeverría y del gerente de Estrategia y Desarrollo de la ACHS, Sebastián Reyes.
Sebastián Reyes, gerente de Estrategia y Desarrollo de la ACHS, enfatiza que “nuestra misión es evitar que existan accidentes laborales y enfermedades profesionales en nuestros trabajadores y el gran rol es cómo promovemos esta cultura preventiva. Esto parte por los adultos, pero también por los niños y que mejor que los mismos niños entiendan cuáles son los riesgos y cuál es la conducta que hay que tener para transitar en la vida de forma segura y evitar accidentes. Esta campaña se va a aplicar a toda la comunidad educativa de Integra y tiene como objetivo educar a nuestras trabajadoras y parvularias, ya que son ellas las que están día a día con los niños y por supuesto generar una cultura preventiva en los niños”.

Julia Escobedo, directora regional de Fundación Integra de la Región Metropolitana Sur Oriente, agrega que “las campañas de este tipo tienen gran importancia para nosotros, ya que como Fundación Integra para nosotros es relevante incorporar la cultura preventiva; no podemos pensar en educación de calidad si no incorporamos lo que es asegurar las condiciones de bienestar de los niños y además, esta campaña incorpora a la comunidad educativa completa: los niños, trabajadores, entorno, apoderados, en la medida que los actores se involucren en el tema, los niños estarán cada vez más seguros y libres de riesgos”.
La finalidad de esta iniciativa también es evitar las ausencias laborales, para que las instituciones educacionales puedan mantener los niveles de enseñanza en lo más alto sin tener que lamentar a parvularias ni auxiliares accidentados. Según fuentes de la ACHS, durante el año 2014 en el sector de educación se produjeron 11.810 accidentes protagonizados por profesores y trabajadores del rubro. Las principales causas de estos eventos fueron golpes y caídas con un 54% y un 14% ocurrieron debido a sobreesfuerzo. Las partes del cuerpo más afectadas fueron las extremidades inferiores y superiores, siendo los principales diagnósticos esguinces y contusiones. En términos temporales, la mayor cantidad de accidentes se producen en los meses de marzo, agosto y octubre, fechas en donde se retoman las actividades luego del período de vacaciones.
“Tal como dice nuestra campaña, en los jardines la seguridad es nuestro primer matriculado. Al implementarla, tanto las educadoras como los niños regresarán sanos y salvos a sus hogares. La idea es que los niños estén en un entorno seguro, lo que dará mayor tranquilidad a todo el equipo de trabajo de los establecimientos, así como a las familias y apoderados. Para que logremos nuestro objetivo, necesitamos la ayuda de todos”, señala Leonardo Aguirre, jefe de proyectos Integra de la ACHS.
El papel de las educadoras es fundamental en este proceso, porque en medio de las planificaciones de comienzo del año escolar, el ingreso de los niños y otros quehaceres, los riesgos de accidentes aumentan considerablemente. Según datos de La Fundación Integra de la Región Metropolitana Sur Oriente, en el mes de marzo se concentra la mayoría, con 620. Esto se debe a que los niños entran al jardín y tienen que adaptarse nuevamente después de haber pasado casi 3 meses en sus casas. La comuna donde se presentó la mayor cantidad de accidentes fue La Pintana, con 994; seguida por El Bosque con 452 y Las Condes con 395. La gran diferencia se explica, porque La Pintana es la comuna con mayor número de jardines, por ende, tiene mayor accidentabilidad.
Las causas más comunes fueron golpes con algún elemento (803), caídas (716) y mordeduras de otros niños (687). Los niveles más afectado por los accidentes fueron medio menor (988), luego medio mayor (867) y las salas cunas (323). Desde Integra explican que entre medio mayor y medio menor estos eventos ocurren con mayor frecuencia, porque es cuando los niños comienzan a dar sus primeros pasos y a explorar.
La campaña también está dirigida a los conductores de furgones escolares, quienes tendrán más y mejores herramientas para garantizar un viaje sin mayores sobresaltos.
Consejos prácticos
En el marco de la campaña, la ACHS entregará kits con información sobre prevención a las educadoras, apoderados y conductores de furgones escolares.
En el caso de las educadoras, se aconseja que al subir o bajar por una escalera se haga de forma tranquila, sin correr, con atención, tomando siempre el pasamanos y nunca leyendo documentos o mirando el celular. Además, es aconsejable evitar llevar ambas manos ocupadas.
Se debe privilegiar el uso de calzado blando con planta de goma antideslizante. Así se previenen caídas y otros accidentes y se evitará la fatiga muscular en piernas y espalda. Es preferible el calzado cerrado y de taco bajo. Para pegar material didáctico o decorar la sala se debe usar una escalera de tijeras, las sillas y mesas no son adecuadas para esta actividad.
Siempre se debe verificar la seguridad de los juegos infantiles, el material didáctico y las gomas antideslizantes despegadas en escaleras y otras condiciones que puedan provocar accidentes. Además, las educadoras deben mantenerse alerta a las condiciones que las rodean, especialmente en los horarios de patio o recreo y definir los espacios para recreación, estableciendo zonas especiales para que los niños jueguen. En lo posible, delimitarlas y señalizarlas.
En el caso de los apoderados, se aconseja planificar el recorrido hacia los establecimientos para salir con anticipación y tener especial atención en las condiciones del tránsito y cruces de peatones en las calles.
Procurar que la ropa de los niños no tengan cordeles ni elementos extraños que puedan ocasionar algún accidente; como monedas, piedras, bolitas, elementos colgantes, etc.
Si se contratara un furgón escolar verificar que tenga al día los permisos que establece la autoridad y que esté habilitado para transportar niños y niñas de jardines infantiles y salas cuna.
Es fundamental contarle a la educadora si el niño debe tomar algún medicamento o está en tratamiento médico. En este caso se debe llevar la receta con las indicaciones del médico.
Finalmente en el caso de los lactantes se debe evitar el uso de alfileres de gancho en la ropa o chupetes sujetos con cordeles o cadenas.
Para los transportistas es fundamental poner atención en las condiciones del tránsito y cruces de peatones en las calles y cumplir estrictamente con las normas del tránsito. Asegurarse que los niños siempre viajen ordenados dentro del furgón y con el cinturón de seguridad. También revisar el estado del vehículo y hacer las mantenciones correspondientes: luces, frenos y neumáticos.
Adicionalmente, se debe contar con sillas especiales para el transporte de los niños del jardín.
Se recomienda estacionar y sacar el furgón con máxima precaución en los sectores cercanos a los establecimientos, asegurándose que no haya niños detrás del vehículo.