Debilidades del acuerdo tributario:

Es importante que quienes participaron sigan analizando en detalle la reforma, dice su director, Hernán Larraín Matte.

Por LINA CASTAÑEDA.

Una serie de debilidades en la reforma tributaria acordada en forma transversal por el Gobierno y parlamentarios advierte el centro de pensamiento liberal Horizontal. Si bien se abre una alternativa a la renta atribuida, plantea que la tasa máxima efectiva para reinvertir utilidades será de casi 45% y quienes opten tendrán un impuesto corporativo de 27%.

«Es muy probable que este fuerte aumento del impuesto a las empresas y las personas tenga un impacto relevante en la inversión y el empleo, especialmente considerando las cifras que hemos visto en los últimos meses y las proyecciones económicas para el corto y mediano plazo», sostiene en su análisis.

La institución -que dirige Hernán Larraín Matte- valora la disposición de las distintas fuerzas políticas para mejorar el proyecto, pero considera que sigue siendo una mala reforma y no es pro inversión y empleo, como plantean algunos parlamentarios. «Todavía queda tramitación para esta reforma. Creo que lo responsable es que todos quienes participaron sigan analizándola técnicamente», dice Larraín.

Gran parte de las críticas a la reforma que propuso el Gobierno fueron acerca de la poca evaluación de sus efectos y la ausencia de datos públicos con los cuales verificar las aseveraciones de la propuesta. Tras la negociación del protocolo de acuerdo, sigue la misma situación y aún no hay estudios de los efectos, señala la entidad.

Dice que no es clara la capacidad de recaudación de la reforma consensuada y le parece irresponsable que la evaluación de una reforma de esta envergadura se haga sin tener un informe financiero de lo propuesto.

El centro cuestiona que en lugar de buscar la simplicidad, lo que se ha negociado aumenta la complejidad del sistema. Y si bien le parecen positivas las exenciones y tratamientos especiales que atenúan los efectos negativos sobre las pymes, advierte que la multiplicidad de instrumentos y alternativas aumenta los riesgos de elusión, porque hay incentivos para que se construyan empresas de papel para aprovechar este estímulo.

Diferencias de cálculo
Las estimaciones de los analistas difieren a la hora de calcular cuál será la tasa máxima efectiva de la reinversión de utilidades si se opta por tributar sobre base percibida.

Algunos llegan a una tasa máxima de 44,5%, que resulta de considerar el 27% que tributará la empresa más 17,5%, que resulta de descontar como crédito el 65% del impuesto que pagó la empresa. El socio del área Tax & Legal de BDO, Rodrigo Benítez, lo estima en 41,2%. Otros analistas llegan a una cifra cercana a 35% o en torno al 47%.

BDO toma como ejemplo que una empresa reparte el total de sus utilidades después del pago del impuesto y que el socio está en el tramo máximo de renta de 35%. Si la empresa gana 100, paga 27 y quedan 73 por repartir. A los 73, suma el crédito del 65% del impuesto corporativo, esto es 17,5 porque, explica Benítez, en los sistemas integrados, los créditos se asumen como renta y por tanto deben sumarse a la base imponible ( grossed-up) . La suma de 90,5 es la base imponible y el 35% de esa cifra es 31,7. Como el socio tiene un crédito de 17,5, lo resta y queda un impuesto a pagar de 14,2 que sumado a 27 que pagó la empresa llega a 41,2%.